La oposición y sus carencias
¬ Augusto Corro martes 21, Feb 2023Punto por punto
Augusto Corro
El ex presidente Felipe Calderón vapuleó a los partidos de oposición que muestran una triste ausencia de respetabilidad, credibilidad, vigor y liderazgo.
En un desplegado exhortó a devolver la vida a PAN, PRI, PRD y Movimiento Ciudadano (MC). Es decir, a resucitarlos.
Por supuesto, hizo un llamado para formar un nuevo partido político.
Lo anterior con el fin de evitar la caída de México en una dictadura populista del siglo XXI corrupta, incompetente y autoritaria.
Dijo también que se debe “organizar una resistencia democrática firme y constante para el siguiente sexenio.
Para nadie es un secreto que la oposición se encuentra en uno de sus peores momentos tras su derrota en las elecciones presidenciales de 2018.
Será muy interesante saber quien o quienes responderán positivamente al exhorto de Calderón, quien se encuentra en España.
De los peores sexenios
Quizás, Calderón piense que los mexicanos carecen de memoria para recordar lo negro de su sexenio.
Como se sabe, el michoacano llevó a México a una guerra contra el narcotráfico sin estrategia. Ese error provocó la muerte de miles de ciudadanos y dejó la violencia e inseguridad que azota a la población en numerosos lugares de nuestro territorio.
Con el enfrentamiento a la delincuencia organizada, Calderón quiso distraer la atención del fraude en las elecciones presidenciales que ganó Andrés Manuel López Obrador.
El michoacano llegó al poder apoyado por Vicente Foz, el mandatario que le antecedió en el poder.
Los dos expresidentes de extracción panista rindieron, con su presencia en la Presidencia de la República, un homenaje a la ineptitud.
¿Con qué cara? Como se dice textualmente, el ex presidente Calderón convoca a la oposición a fortalecerse.
Las organizaciones políticas de oposición necesitan resucitar, pero no será con los consejos de un ex funcionario, cuyas declaraciones rayan en el cinismo.
¿Un nuevo partido?
Claro que la oposición necesita un nuevo partido, pero no será Calderón el que logre fundarlo. En años recientes, Margarita Zavala, la esposa de Calderón, intentó formar una organización política.
Inclusive hasta solicitó su registro como partido al que le llamarían México Libre. El intento no funcionó. Las autoridades electorales no lo aceptaron, pues encontraron una serie de irregularidades.
En las elecciones de 2018, la señora Zavala de Calderón participó como candidata independiente. Ni siquiera los panistas quisieron apoyarla.
Sin embargo, la esposa de Calderón disfruta de una curul en San Lázaro, en donde constantemente la critican por el pésimo gobierno del michoacano. El nombre de Margarita suena en el PAN como otra de las posibles candidatas en los comicios presidenciales.
Aunque va adelante en las encuestas de las preferencias electorales el diputado Santiago Creel, un “cartucho quemado” que fue secretario de Gobernación en el gobierno de Fox.
Le sigue, en segundo lugar, la senadora Lilly Téllez.
El juicio a García Luna
El ex presidente Calderón vive momentos difíciles. Resulta que Genaro García Luna, el hombre de sus confianzas, su brazo derecho en el gobierno, es juzgado en una corte penal en Nueva York.
Se encuentra en espera que el jurado lo condene o lo deje en libertad.
El hombre de las confianzas de Calderón es acusado de aceptar millones de dólares en sobornos del Cártel de Sinaloa, para llevar cocaína a Estados Unidos. García Luna fue señalado como el hombre más fuerte del gabinete calderonista en la guerra contra la delincuencia organizada.
Lo importante es saber si Calderón estaba enterado de la conducta criminal de su subordinado, de los presuntos negocios con los cárteles de la droga. En una encuesta reciente publicada en el diario “El País”, los entrevistados, alrededor de un 84 por ciento, creen que el expresidente Calderón debería ser investigado por posibles vínculos con el narcotráfico, luego de que en el juicio contra su ex secretario de Seguridad, Genaro García Luna, se reveló que supuestamente habría dado protección al Cártel de Sinaloa.
En fin, cabe preguntar si las declaraciones de Calderón son para dejar a un lado lo que sucede en la corte de Brooklyn. Es posible.
¿Usted qué opina amable lector?
