Sedetus confirma descarga de balasto en Puerto Morelos
Nacional miércoles 1, Feb 2023
Para vías del Tren Maya
- Afirman que el traslado de la piedra va a durar por lo menos dos meses
Puerto Morelos.— La Secretaría de Desarrollo Territorial, Urbano Sustentable (Sedetus) confirmó que la llegada de la piedra porfirita, con la que se producirá el balasto para las vías del Tren Maya, será a través de Puerto Morelos, asimismo, explicaron que la descarga del material y su posterior traslado a través de cientos de camiones de carga se hará por la única vía de ingreso y salida del muelle, que es la avenida José María Morelos, durante dos meses, aproximadamente.
El titular de Sedetus, Armando Lara Denigris, adelantó que se trabaja en los permisos para un camino alterno, pero en tanto éste no se concluya, la piedra será movilizada por la avenida José María Morelos. “Ya estamos en los trámites ambientales, los ambientalistas se ponen medio rudos, pero ya entendieron y les explicamos que vamos a generar más pasos de fauna, pasos hídricos y se va a mejorar esta calle y que será de gran beneficio para la ciudad”, dijo. Para los trabajos mencionados, el funcionario dijo que se tiene contemplada una inversión de 100 millones de pesos y serán recursos 100% federales.
El proyecto consiste en la construcción de una vialidad de cuatro carriles junto a la actual carretera José María Morelos, misma que contará con ciclovía, cableado subterráneo y la empresa Aguakan ampliará la capacidad de las tuberías para el abasto de agua. “La piedra se recibirá en el muelle de Puerto Morelos, desde donde se moverá a una trituradora ubicada en la Ruta de los Cenotes, donde la piedra molida se convertirá en balasto y de ahí se distribuirá a los tramos 5,6 y 7 del Tren Maya, que corren desde Cancún hasta Bacalar”, dijo Lara Denigris.
Hay que recordar que el movimiento Sélvame de Tren, opositor al Tren Maya, alertó a finales de 2022 sobre los riesgos que implicará para la barrera arrecifal, ubicada frente a las costas de Quintana Roo, el desembarco de millones de toneladas de piedra rajón en Puerto Morelos, al no haber un puerto con el calado suficiente para el desembarco de los buques de carga, por lo que existe un grave riesgo de que durante las maniobras de desembarque destruyan la barrera arrecifal.
Obra podría afectar derechos de indígenas
Nueve relatores especiales y un grupo de trabajo de derechos humanos de la ONU advirtieron que el Tren Maya podría poner en peligro los derechos de los pueblos indígenas y otras comunidades a la tierra y los recursos naturales, los derechos culturales y el derecho a un medio ambiente sano.
En un comunicado, los expertos destacaron que, dado que el gobierno ha elevado al Tren Maya a la categoría de proyecto de seguridad nacional, puede derogar la aplicación de las salvaguardias ambientales y sociales. “Esta decisión no sólo tiene el potencial de permitir que los abusos de los derechos humanos sigan sin ser abordados, sino que además socava el propósito del proyecto de llevar un desarrollo social y económico inclusivo y sostenible a los cinco estados mexicanos involucrados”, dijo Fernanda Hopenhaym, presidenta del Grupo de Trabajo de la ONU sobre Empresas y Derechos Humanos.
Agregó que la creciente participación del Ejército en la construcción y gestión del proyecto también “suscita gran preocupación”, pues plantearon que los defensores de los derechos humanos que han señalado los impactos negativos del proyecto, enfrentan amenazas y ataques.
“Como proyecto dirigido por el Estado, el gobierno mexicano debería tomar medidas adicionales para garantizar el respeto de los derechos humanos y el medio ambiente”, destacaron en el comunicado. De tal manera que le exigen al gobierno garantizar la participación sustantiva de las comunidades afectadas y llamaron a la transparencia en las evaluaciones de los derechos humanos y el impacto ambiental, antes de tomar cualquier decisión relacionada con el Tren Maya.
Los expertos resaltaron que se debe respetar el consentimiento libre, previo e informado de los pueblos indígenas, y que se tiene que evaluar de forma transparente los impactos acumulativos reales y potenciales de los proyectos.