Rubén Maya expone con gran éxito “Construcciones del Psico-Ser Onírico”

• En el museo José Luis Cuevas

«Construcciones del Psico-Ser Onírico» es un encuentro; un diálogo que podremos llevar a cabo si nos despojamos de lo terrenal y nos adentramos en lo onírico.

Así es, estamos frente a una de las exposiciones más importantes en la trayectoria del queretano Rubén Maya, un artista que ha dedicado parte de su quehacer artístico a reflexionar en torno al hombre y sus acciones más primitivas, por lo que podrán observar seres devorando a otros o a sí mismos en estado contemplativo, contando con una tranquilidad que se ve reflejada en cada una de sus piezas.

Los recursos gráficos del artistas componen una muestra precisa del inconsciente en las más de 250 piezas, todas hechas de formatos y técnicas distintas, en donde a modo de juego la intervención se realizó en el espacio museográfico José Luis Cuevas, y en breve estará en un nuevo espacio por definir, desde luego con la intenciòn de que todos los sueños quepan en un importante recinto, como en este donde estuvo hasta el martes 6.

Uno de los objetivos de esta exposición de Rubén Maya, quien ha expuesto cerca de 100 veces en diferentes partes del mundo como Londres, China, Nueva York y México, de manera individual y cerca de 250 veces de manera colectiva es que jueguen, compartan, analicen y vislumbren la alquimia que les propone con su obra.

«El juego entre los sueños y los espacios contienen lo más profundo de cada uno de nosotros», comentó el artista egresado de la Licenciatura en Artes Visuales de la Escuela de Artes Plásticas de la UNAM, además hizo una Maestría en grabado en la Academia de San Carlos, luego un Doctorado en Bellas Artes por la Universidad Complutense de Madrid, en España.

«Construcciones del Psico-Ser Onírico» es un encuentro; un diálogo que podremos llevar a cabo si nos despojamos de lo terrenal y nos adentramos en lo onírico. Permitamos que las sombras nos rebasen y hagamos que la homeostasis se complemente a través del universo generado por el artista, mismo que nos invita a aprender del propio espìtitu para entonces comprender lo que es el equilibrio entre crear, soñar y representar con símbolos, todo lo relacionado con nuestra existencia.