López Obrador, de caudillo al…?
¬ Francisco Reynoso martes 5, Jul 2022Triple Erre
Francisco Reynoso
- Obispos acusan a AMLO de complicidad con cárteles
- Claudia Sheinbaum arranca campaña en tierra de los Monreal
El domingo pasado, Claudia Sheinbaum se metió a la boca del lobo. Inició campaña rumbo al 2024 en Zacatecas, la tierra de su enemigo político. No adversario. Ni rival. Enemigo es el término exacto.
Porque Ricardo Monreal nunca será un oponente en buena lid para la corcholata preferida de López Obrador. Podría decirse que se aborrecen.
En gran medida, Monreal le debe a la Sheinbaum su distanciamiento con López. Los resultados desastrosos en las elecciones del 2021, en las cuales Morena y la Sheinbaum perdieron más de la mitad de la capital de la República, se le atribuyen a Monreal.
Ricardo nunca lo ha aceptado ni lo aceptará. Pero sus alianzas con Jesús Zambrano, mandamás del PRD y con varias figuras del PRI fueron mundialmente conocidas.
Bueno, pues la Sheinbaum inició campaña pre presidencial en Zacatecas. El domingo pasado Ulises Mejía Haro, hijo de un disidente del monrealismo, tomó el comando de la operación que tiene como lema: “Claudia Va”.
La importancia electoral de Zacatecas es mínima. Su padrón electoral es de 1.2 millones de personas. Ante Jalisco, Veracruz y Puebla, ya no se diga Estado de México y la Ciudad de México, Zacatecas resulta insignificante.
Empero Claudia Sheinbaum, seguramente aconsejada por López, inició campaña en Zacatecas, en territorio monrealista.
El mensaje es claro para el presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado.
También arranca Ricardo
Saúl Monreal será el operador en jefe del movimiento monrealista en Zacatecas que también arrancó el domingo. Ya incluido en el grupo de corcholatas que buscan suceder al caudillo López, Ricardo Monreal comisionó a su hermano menor para que convenza al pueblo sabio de su tierra de que sería una bendición que un Monreal llegara a la Presidencia de la República. El futuro es nuestro, recita el cachorro de la dinastía Monreal.
En ese trajinar por todo el estado en favor de Ricardo, Saúl busca llevar agua a su molino. El hoy presidente de Fresnillo quiere estar en las boletas del 24 como candidato al Senado de la República. Buscará que lo postule Morena y sus aliados PT y Verde. Y le gustaría hacer fórmula con la petista Geovanna Bañuelos, senadora petista que buscará la reelección. Sin embargo, no descarta ninguna eventualidad. Está preparado para brincar a la coalición de PRI-PAN-PRD o volver a Movimiento Ciudadano.
AMLO, cómplice de la delincuencia
Sube de tono la confrontación entre López Obrador y los ensotanados de la Iglesia católica, apostólica y romana.
El arzobispo Ramón Castro, secretario de la Conferencia del Episcopado Mexicano —la alta alcurnia del clero con derecho de picaporte en el Vaticano—, acusó al presidente López de ser cómplice del crimen organizado.
Ni más, ni menos.
El purpurado dijo en Morelos, en los dominios de Cuauhtémoc Blanco, quien también tiene amigos íntimos en los cárteles, que la política de abrazos, no balazos es demagógica y en gran medida cómplice de los señores del narco.
Y lo acusó también de mentiroso.
Con sus mentiras en las mañaneras cotidianas, según el pupilo de la Santa Sede, López tuerce la realidad de México.
¡Tenga para que aprenda!, diría López.
Pero López Obrador había lanzado la primera piedra. Acusó a los religiosos de ser hipócritas y levanta falsos.
Si el discurso de los obispos lo empiezan a manejar todos los curas en sus iglesias y parroquias, ¡aguas! señor López. Porque el pueblo bueno, el pueblo sabio, es manipulable por hambre, por necesidad, por ignorancia.
Pero no se metan con tata Dios, con sus santos y vírgenes y con el padrecito porque es capaz de quemar vivo al anticristo.
Requisitos infames a migrantes
En el Aeropuerto de la Ciudad de México, el Instituto Nacional de Migración colocó enormes avisos destinados a los paisanos mexicanos, a los “héroes nacionales” que regresan a su tierra linda y querida.
“Si eres mexicano –consignan los avisos– deberás portar cualquiera de los siguientes documentos: Pasaporte válido y vigente, cédula de identidad ciudadana o cédula de identidad personal, copia certificada del acta de nacimiento, matrícula consular, carta de naturalización o certificado de nacionalidad mexicana, credencial expedida por el Instituto Nacional Electoral”.
Y si el migrante viene acompañado por un menor, la lista de papeles y requisitos se duplica.
Sólo faltó escribir entre paréntesis: “Si no traes documentos legales, pero sí muchos dólares, nos podemos arreglar en la aduana”.
La verdad es la verdad y no admite otros datos