«Ok, está bien» es irreverente y políticamente incorrecta: Tío Rober
Espectáculos lunes 12, Abr 2021
El standupero lanza su película
- Se presentará este 16 de abril en Tijuana y el 24 del mismo mes en Guadalajara
Arturo Arellano
Roberto Andrade, mejor conocido como el Tío Rober, es un destacado comediante, que ahora se complace en presentar su primera película, titulada “Ok, está bien”, de la cual escribió el guion y se involucró en gran parte de la producción, cabe destacar que la cinta se presenta en formato de blanco y negro, además de que ya ha sido calificada por muchos como políticamente incorrecta, pero es precisamente lo que el artista defiende, siendo congruente con su oposición a la cancelación de cintas, artistas o contenidos artísticos por una doble moral.
En entrevista con DIARIOIMAGEN comentó “un día en una madrugada de crisis decidí decirle a mi novia ‘me voy de la ciudad y no regreso hasta tener un guion’, me fui a Querétaro, con el poco dinero que tenía pagué un hotel y me puse a escribir el 70% de esta historia, regresé y aquí termina lo que me faltaba, después mi novia entró al a carrera de cine, terminó y me dijo que si no iba a hacer la película, insistió y me la pidió para debutar con ella y la hizo”
Agregó que “quise hacer cine independiente de los noventas, de ese que se hacía con muy poco dinero, nos gustaba la idea de homenajear a todos los directores y creadores de esa época. La hicimos en blanco y negro porque nos ahorraba sobre todo mucho dinero en cuestión de estética, porque la paleta de colores no es tan específica, como si hubiéramos tenido que filmar en otro formato. Se hizo con muy poco dinero y nos parecía atractivo que la película es un homenaje a Manhattan de Woody Allen”.
Describió sobre la trama “es la historia de un ex estudiante de guionismo que no ha podido escribir uno, vive un momento patético en su vida, es un personaje que no sigue ningún modelo de conducta, que es amoral, grotesco, grosero, pero que nos sirve de pretexto para expresar a través de una comedia lo que son los procesos artísticos. De hecho, la película ha tenido ciertos comentarios, la califican como una políticamente incorrecta, pero los malos comentarios han sido los menos y quienes la disfrutan los más”.
De tal manera que el comediante dice “quedo muy satisfecho, la gran ventaja de trabajar con Gabriela (su pareja y directora de la cinta) es que me conoce de hace muchos años y conoce todo el proceso, ha sido muy respetuosa con la obra, cosa que coloca a Gabriela como una de las directoras que hay que seguir porque entiende esta comunión entre el guionista y directora”.
Reconoce por otra parte que “no hay un mensaje particular, supongo que la manera en que se comporta la sociedad va señalando al artista el mensaje que quiere dar, soy un gran crítico de lo que es esta política de la cancelación, me parece sumamente hostil, es visceral, pero sobre todo peligrosa, porque sin pruebas se cancela a la gente e incluso las grandes corporaciones están a favor, la cancelación no ayuda en nada. El comediante tiene la labor de ser crítico con su momento histórico porque eso es lo que te hace un buen comediante” afirma.
Finalmente, con influencias de Quentin Tarantino, Chaplin, Will Ferrel, y otros artistas cómicos excepcionales, destaca que “el Stand Up mexicano es un niño, no se puede esperar demasiado de un niño, pero este es un niño prometedor y dice cosas demasiado inteligentes, estamos ante un niño prodigio, que promete demasiado y se puede convertir en adulto importante, incluso necesario para el acontecer social del país, tengo muchísimo furor, optimismo, de ver lo que pasa con el Stand Up mexicano, pero te aseguro que lejos de morir se va a convertir en una herramienta de crítica y alianzas importante”
Mientras tanto “Ok, está bien” tiene una gira por autocinemas que ha pasado por Querétaro Puebla, León, Pachuca y llegará a Tijuana el 16 de abril, para luego presentarse en Guadalajara el 24 del mismo mes.
Escribir el 60 por ciento del guion le llevó al Tío Rober alrededor de una semana, pero para tomar el valor de hacerlo tuvieron que pasar cuatro años