Gobiernos de caricatura
Alberto Vieyra G. miércoles 23, Sep 2020De pe a pa
Alberto Vieyra G.
La Universidad de Harvard, la más popof de Estados Unidos acaba de otorgar un premio de puritita chunga a 9 jefes de Estado que han enfrentado erráticamente con los pies y no con la cabeza, el combate a la pandemia del coronavirus y entre ellos figura tristemente Andrés Manuel López Obrador, quien por cierto se tambalea políticamente y podría tener sus días contados en la Presidencia de México, merced a que arrastra una carretada de problemas sin resolver como el conflicto de la presa La Boquilla en Chihuahua.
El galardón de chunga que se entrega cada año en la Universidad de Harvard, en los yunaites incluyó la categoría “Educación Científica Médica” con dedicatoria a 9 Jefes de Gobierno entre ellos: Donald Trump, Jair Bolsonaro, Boris Johnson y Andrés Manuel López Obrador, aunque también figura el español, Pedro Sánchez de quien los españoles exigen que ruede su cabeza por la torpeza con que ha manejado la pandemia del siglo.
La mayoría de los mandatarios galardonados con el burloncito premio enfrentan en sus naciones una severa crisis política, económica y social que podrían mandarlos a su casa en cualquier momento porque han jugado y se han burlado del coronavirus haciéndole creer a la población que “no pasa nada” y demostrando con sus erráticas decisiones que los políticos pueden influir de manera inmediata sobre la vida y la muerte de las personas, mucho más que los médicos y los científicos.
Donald Trump, en Estados Unidos, y Andrés Manuel López Obrador, en México, son dos casos por demás emblemáticos, pues en ambos gobernantes no hubo poder humano ni divino que los obligara a ponerse cubrebocas, bueno ni los propios “científicos” encargados de las pandemias en ambas naciones. Son dos anárquicos gobernantes que se sienten indestructibles y con ello han dado un ejemplo desastroso a la población que mal gobiernan, lo que se ha traducido en una mortandad que en Estados Unidos alcanza los 200 mil y en México los 74 mil y en ambos casos, AMLO y Trump voltean la cara cuando se les habla de muertos y si la dan, justifican su negligencia criminal e ineptitud culpando a otras naciones de sus males.
Tan sólo en México, ya suman casi mil quinientos muertos, entre médicos y enfermeras que han muerto porque el negrerismo de AMLO los mandó a la guerra sin fusil, es decir sin los elementos esenciales para protegerse y en cientos de casos médicos y enfermeras se convirtieron en portadores del letal virus contaminando a familias completas, que en la mayoría de los casos murieron en sus casas porque la orden de AMLO fue no saturar hospitales para que no fuese cuestionado porque la pandemia se le había desbordado y salido de control.
En las últimas dos semanas, Donald Trump, quien busca su reelección el 3 de noviembre próximo, tuvo que admitir que escondió la realidad de la crisis sanitaria en Estados Unidos porque no quería crear una alarma o psicosis entre la población. Esa sola declaración de mea culpa bastaría para que fuese destituido como presidente de Estados Unidos, igual que AMLO, en México, quien advertía que a él, el coronavirus le hacía lo que el aire a Juárez porque cargaba en su bolsillo sus amuletos para contrarrestarlo. Dos gobernantes de chunga. ¿Verdad que se merecen el premio de chunga que les otorga la Universidad de Harvard? Y ¿Verdad que también se antoja que rueden sus cabezas para que no sigan provocando dolor a sus pueblos?
En Reino Unido, Boris Johnson, el primer ministro inglés, está en la cuerda floja con 78 mil 553 muertes, mientras que Jair Bolsonaro, en Brasil, enfrenta también al repudio popular con 137 mil muertos por el coronavirus.
¿Usted juzga lógico que esos gobernantes mentirosos, engañifas que rinden culto a satanás como el padre de la mentira, merezcan otra oportunidad para presentarse en las urnas en próximas elecciones, como ocurrirá en Estados Unidos este año y en México, para el próximo año, o cree usted que deban ir a la cárcel esos gobernantes por su manifiesta negligencia criminal?