El futuro de Calderón
¬ Augusto Corro martes 30, Jun 2020Punto por punto
Augusto Corro
El presidente Andrés Manuel López Obrador confirmó que se reunirá con su homólogo estadounidense, Donald Trump, para celebrar la entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (T-MEC). El encuentro tiene su dosis importante de política para los dos funcionarios: Trump se encuentra en plena campaña electoral para continuar en el poder cuatro años más. El mandatario mexicano tiene un asunto que podría tratarse al margen de la agenda oficial: el caso del ex secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna, quien se encuentra preso en una cárcel estadounidense, en espera de un juicio por el delito de lavado de dinero y por proporcionar información falsa a las autoridades del vecino país. Quizá la acusación más grave contra García Luna es la que se refiere a su protección y ayuda al Cártel de Sinaloa durante sus funciones como titular de Seguridad Pública en el gobierno del entonces panista, Felipe Calderón Hinojosa. Un testigo en el juicio contra Joaquín “El Chapo” Guzmán dijo que le entregó millones de dólares a García Luna para que no obstaculizara las labores del grupo criminal sinaloense.
Debido a esas acusaciones, en México surgieron las preguntas lógicas sobre el conocimiento o ignorancia de Calderón Hinojosa sobre la conducta criminal de un elemento de su gabinete presidencial. Tal vez el más importante elemento en la lucha contra la delincuencia organizada. ¿Cómo es posible que el propio presidente Calderón Hinojosa no se diera cuenta, no sospechara del contubernio entre García Luna y los representantes del cártel de la droga? Es en este punto donde surgen las sospechas sobre el proceder del mandatario panista. ¿En realidad no supo de los manejos delincuenciales de su subordinado o fue su cómplice? En el juicio a García Luna podrían surgir las respuestas a los planteamientos sobre la inocencia o culpabilidad de Calderón Hinojosa. ¿Qué tan decidido estará el ex secretario de Seguridad de involucrar a su jefe, en sus andanzas, de actuar como testigo protegido para amortiguar su condena? ¿El futuro de Calderón Hinojosa será comentado entre los presidentes López Obrador y Trump?
El ex mandatario Calderón Hinojosa realiza en el presente una intensa actividad política. Su ambición por el poder lo llevó a olvidar los errores que cometió como Ppresidente de México. Entre otros, el de declarar, sin estrategia alguna, la guerra a la delincuencia organizada. Los resultados fueron terribles para México. La idea de descabezar cárteles no funcionó, pues estos se fraccionaron y crearon nuevas generaciones de capos. La lucha entre los criminales se volvió más violenta con consecuencias funestas para la sociedad civil. Las cifras conservadoras sobre los resultados de la guerra fallida registraron más de 104 mil personas asesinadas y más de 14 mil desaparecidas, así como miles de huérfanos y viudas.
Calderón Hinojosa dejó la herencia de su guerra a los gobiernos de Enrique Peña Nieto y López Obrador. El priista fue incapaz de frenar la espiral de violencia que le heredó al tabasqueño López Obrador, quien en diciembre próximo cumple dos años en el poder, sin controlar las acciones criminales de los cárteles de la droga y del huachicoleo. Su plan de abrazos en lugar de balazos para enfrentar a la delincuencia no ofrece los resultados que se esperan. Las organizaciones criminales no solamente se dedican a sus negocios turbios, sino que también se dan su tiempo para retar a las autoridades y tratar de intimidarlas. El viernes pasado, en la capital de México, al menos 28 sujetos llevaron a cabo una emboscada para asesinar al jefe de la policía local, Omar García Harfuch. En el atentado perdieron la vida tres personas. El hecho demostró que las bandas criminales no se sienten atemorizadas por la accione de los representantes de la ley, empeñados en cometer error tras error para dejar en libertad a presuntos delincuentes, como ocurrió con la acción que dejó libre a Ovidio Guzmán, el hijo de “El Chapo”, en el “culiacanazo”, o en asunto de los parientes de José Antonio Yépez Ortiz (a) “El Marro”, capo del Cártel de Santa Rosa de Lima.
Mientras continúa la ola de violencia y la inseguridad se siente por todos lados, el ex presidente Calderón Hinojosa realiza una intensa actividad en la fundación de su nuevo partido: Mexico Libre, acompañado de su esposa Margarita Zavala de Calderón. Sin recato alguno, los esposos realizaron su campaña de asambleas y recolección de firmas para conseguir el registro de su organización política ante las autoridades electorales. En los últimos días de Julio se sabrá si cumplieron con los requisitos para alcanzar su propósito. Con el cúmulo de antecedes negativos en la vida política de los Calderón-Zavala no será fácil conseguir la luz verde para su nuevo partido. La señora Zavala de Calderón ya participó en las elecciones pasadas, con miles de firmas falsificadas para obtener el registro de la candidatura y su esposo carga sobre los hombros el fraude electoral para derrotar a López Obrador en la contienda electoral del 2006. El futuro de Calderón Hinojosa se encuentra, pues, en la decisión del tribunal electoral y del juicio penal contra García Luna en Estados Unidos. ¿Usted qué opina amable lector?