La estadounidense Lindsey Vonn se llevó el oro en la prueba de descenso alpino
* Especiales, Deportes jueves 18, Feb 2010Whistler, Canadá.- La estadounidense Lindsey Vonn cumplió ayer con los pronósticos que la situaban como favorita y ganó la medalla de oro en la prueba de descenso alpino de los Juegos Olímpicos de Vancouver 2010.
Vonn, con un tiempo de 1,44,19 minutos, logró la primera medalla olímpica de su carrera en unos Juegos en los que buscará hasta cinco preseas doradas. La alegría estadounidense la completó Julia Mancuso con la medalla de plata y el podio se cerró con la austriaca Elisabeth Görgl.
Tras numerosas cancelaciones por el mal tiempo, el sol lució hoy en la técnica pista Franz’s Run, de 2.939 metros y con una caída vertical de 770 metros, en la que a los pocos segundos de la salida ya se alcanzan los 100 kilómetros por hora.
“Vonncouver”, se leía en las pancartas de los muchos aficionados de Estados Unidos llegados a Canadá para ver a la esquiadora más exitosa de la historia del país, que, sin embargo, tenía una cuenta pendiente, el esquivo oro olímpico tras Salt Lake City 2002 y Turín 2006. Hasta hoy.
Salió con fuerza del portillón y tras sortear los primeros giros del recorrido, voló y mejoró el tiempo de Mancuso para situarse líder. 1:44,19 era el cronómetro a batir ahora por la alemana Maria Riesch y por la sueca Anja Pärson.
“No sé cómo ganarle”, había dicho la alemana tras el penúltimo descenso disputado en la Copa del Mundo, el quinto triunfo seguido de Vonn. En el sexto, en St. Moritz, el último antes de los Juegos, supo vencer finalmente a la estadounidense, así que llegaba con ilusión de repetir.
Pero antes era el momento de Pärson, que se jugó todo. Voló por la pista en busca de recortar el tiempo de Vonn o de lograr un metal que la igualara con la croata Janica Kostelic como la esquiadora con más medallas olímpicas en la historia. En el último salto, el vuelo fue real, y la caída, descontrolada, dolorosa. La sueca se estampó violentamente en el suelo.
Turno para Riesch, que pudo perder concentración ante la espera en el portillón por la caída de Pärson. Sin ritmo, cedió más de dos segundos respecto a Vonn. No había opción ni de medalla. La alemana emplazó a la estadounidense para la siguiente prueba, donde Vonn buscara su segundo oro.