La lotería y el avión
Alberto Vieyra G. miércoles 29, Ene 2020De pe a pa
Alberto Vieyra G.
¡“No era una ocurrencia” … era una ideotota! El avión presidencial seguirá convertido en una cortina de humo para esconder los grandes problemas nacionales como el desabasto de medicamentos en hospitales, la desastrosa economía, la macabra inseguridad que dejo 35 mil 588 asesinatos dolosos en el primer año de desgobierno de Andrés Manuel López Obrador y tantos problemas más que son escondidos cuando el Presidente les echa la culpa a los gobernantes del pasado y le saca al bulto en el presente.
AMLO ya presentó este martes un “chachito” de muestra que costará 500 pesos y con los cuales bolseará a los mexicanos en un infame y demencial caso de populismo político, con el que ahora pretende comprar medicamentos, cuando los recursos del avión presidencial ya fueron comprometidos por buena parte del país para meter agua potable, alumbrado público, vigilancia y, en fin, que el señor presidente esta como esos mexicanos que se meten en tandas ilusionados en recibirlas primero para resolver sus broncas económicas, y a sus acreedores les venden la ilusión de que van a recibir su “tandota” y se pondrán a mano con ellos; pero después salen con que dijo mi ama que siempre no, igualito que el presidente. ¿Eso es seriedad en la institución presidencial?…
Mi modesta opinión es que no le hagamos el caldo gordo al populismo ramplón de AMLO. Imagínese que en una de esas le pega al gordo del avión presidencial y ¿qué haría con él? ¿dónde lo estacionaria? De entrada, tendría que pagar a Hacienda un dineral de impuestos sobre la renta, tendría que contratar pilotos, a menos que quiera ponerle el piloto de la estufa o del boiler, tener un estacionamiento exclusivo, una pista de aterrizaje con una torre de control o descontrol y para todo ello se requieren permisos y pachocha para tramitarlos o ¿lo vendería, a sabiendas de que un año de desusó el aparato presidencial ya esta mas chatarra que la comida rápida?
El caso es que las ocurrencias absurdas y surrealistas del señor presidente no tienen límite. No hay seriedad en la conducción del país y habrá que decirlo muy claro ¡Se ha usted serio, señor presidente!, para que se le respete como manda Dios.
Y a propósito, una más de AMLO: Ante la inminente llegada del coronavirus a México que ya dejó más 130 muertos en China y otras partes del mundo y millones están infectados, el inquilino de Palacio nos tranquiliza diciendo que “México está preparado para hacerle frente a la pandemia del siglo” ¿Cómo señor presidente, sin medicamentos en hospitales, con tecitos caseros, con aspirinas y “mejoralitos”? ¿Dónde están las vacunas o pretenderá el ocurrente presidente combatir el coronavirus como combate a la delincuencia con “abrazos y no con balazos?
Sin duda que la peste del coronavirus será otra inmejorable oportunidad para manipular a la sociedad mexicana, como ocurrió en el 2009 con la famosa fiebre porcina, conocida como H1N1 pero que resultó un monumental engaño con el cual las llamadas farmacéuticas trasnacionales de la muerte se hincharon de billetes vendiendo a decenas de gobiernos del mundo millones y millones de supuestas vacunas para la influenza. La respetuosa recomendación de este átomo de la comunicación es que no sea presa del pánico, que extreme precauciones y “que no panda el cúnico”.
Y en otro asunto, la Morena del Presidente se resquebraja. Tiene 3 jerarcas nacionales: AMLO, la Polevnsky y el intrauterino Alfonso Ramírez Cuéllar, incondicional de ya sabe quién que pretende resolver la sucesión de la dirigencia nacional de Morena con una encuesta ¿Se acuerda quién la sugirió? ¡Valla manera de quebrarse la cabeza! La cuestión es Morena podría ser flor de un día en las próximas elecciones federales, pues salió peor que el PRD.