Niños, en pie de guerra
Alberto Vieyra G. martes 28, Ene 2020De pe a pa
Alberto Vieyra G.
Dos hechos patéticos estremecieron la semana pasada a todos los mexicanos, incluyendo a una insensible y simuladora clase política: La protesta de niños con cáncer en el Aeropuerto Internacional Benito Juárez de la Ciudad de México y la presentación en sociedad de un pequeño ejército de 19 niños perfectamente bien armados y entrenados que hoy están en pie de guerra en Chilapa, Guerrero ante la incapacidad de ineptos gobiernos federal, estatal y municipal. ¿Por qué tienen que ocurrir hechos extremos en México para que el gobierno voltee a ver, lo que no quiere ver pero que nos habla del caos que vive la niñez mexicana y en general la patria mexicana y que la insensible clase política se niega a resolver?
Una fotografía en primera plana publica por el diario MILENIO le ha dado la vuelta al mundo y en ella se pueden ver a niños de entre 5 y 15 años que forman parte de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias-Pueblos Fundadores (CRAC-PF), que para algunos estudiosos es una extensión del llamado cártel de “Los Rojos” que hoy se disputa la supremacía en la Montaña de Guerrero por la siembra de amapola contra los llamados “Los Ardillos” y juntos han creado escenarios infernales con matanzas, tras matanzas.
Otros diarios de circulación nacional publicarían las desgarradoras fotografías tomadas a los niños y sus padres en el Aeropuerto de la Ciudad de México reclamando y con urgencia medicamentos, mientras la ineptitud gubernamental justifica sus hierros echándole la culpa a médicos, directores de hospitales, empresas farmacéuticas, la corrupción y el presidente de la república se niega a recibir a esos niños que de no ser atendidos con la urgencia que reclaman esos casos de cáncer, irremediablemente irán muriendo poco a poco.
¿Qué nos dicen ambos casos extremistas? Qué el Estado no funciona es un estado fallido o que no hay gobierno en México, o bien que los presupuestos aprobados por la Cámara de Diputados alguien se los está robando o está lucrando electoralmente con ellos para perpetuarse en el poder.
El ejército de niños en Chilapa haría que AMLO y su sequito voltearan a la Montaña de Guerrero, donde impera la ley del talión o la ley de la selva, pues la disputa territorial entre los grupos delincuenciales ha provocado que miles de personas tengan que dejar sus casas y sus tierras porque los gobiernos son incapaces de poner orden y traer la paz y la seguridad que reclaman los pobladores. El gobierno amlista acusa hoy a los grandulones de violar los Derechos Humanos de los niños que están en pie de guerra. ¡Vaya asunto social y cultural de grueso calibre!
Ese hecho, nos habla también del estrepitoso fracaso sobre “la estrategia” de AMLO para combatir a las mafias criminales con “abrazos y no con balazos”. ¿Será la niñez mexicana la que tenga que poner orden en tantísimo desorden en esta patria mexicana ante la probada incapacidad de una maldita clase política que o bien, es cómplice o socia del crimen organizado?