T-MEC clandestino
Alberto Vieyra G. martes 17, Dic 2019De pe a pa
Alberto Vieyra G.
“Chamaquearon” los gringos a AMLO y compañía, y todo por no leer y no masticar el inglés. Porque a ver, a ver: ¿cómo esta eso de que el T-MEC será un acuerdo clandestino? ¿qué quiere decir AMLO con eso de clandestino? Veamos: El tumba burros define que clandestino es algo se hace de forma oculta o secreta para burlar la ley. Será que el que hace la ley, hace la trampa.
¿“Los gringos” burlaron la ley? ¿Son más corruptos que los mexicanos? ¡Ufff… nos dan cátedra!, lo malo es que “los gringos” siempre buscan que los gobernantes de otras naciones sean más corruptos que los anteriores.
El agregado de última hora al T-MEC por presiones de Donald Trump y de los demócratas en el congreso gringo obligaron al régimen de AMLO aceptar un Tratado neoliberal hasta la pared de enfrente y lo aceptó jubiloso quien se dice ser “odiador” de la era económica neoliberal, pero ahora nos sale con el cuento de que “Eso no se acordó y esto sale de manera clandestina” el polémico asunto de los agregados laborales de Estados Unidos para inspeccionar a empresas mexicanas, hizo que al régimen amlista se le hiciera bolas el engrudo. AMLO aduce que fue “una imposición clandestina”; el canciller, Marcelo Ebrad jura y perjura que no, que no hay tales inspectores y que todo se arreglara por la vía del diálogo con los norteamericanos. Por su lado el negociadorcito chafa, Jesús Seade no encuentra en donde meterse y después de montar en cólera se fue a los “yunaites” a exigirles a los pecosos que le expliquen cómo estuvo eso del término clandestino, del que habla su patrón de Palacio Nacional. Seguramente que hora que regrese don Seade nos saldrá con el cuento de que el acuerdo del acuerdo, del otro acuerdo y de lo acordado, es que estaba en letra chiquita o en inglés y nadie se dio cuenta que los gringos los estaban “chamaqueando” pero dicen allá en mi tierra “no tiene la culpa el indio, sino el que lo hace compadre” y “ladrón que roba a ladrón, tiene 100 años de perdón”
En el gobierno de AMLO sostienen la tesis de que el apéndice o agregado estaba en inglés y como el señor presidente no lee y no habla ni gota de inglés por aquello de que se le valla a olvidar el totonaco, pues nada mas vio que la escritura del documento estaba muy elegante y hasta con letras grandes y rimbombantes. Y llama poderosamente la atención que los 111 senadores de Morena y sus aliados, hallan aprobado el agregado al Tratado Comercial en menos de lo que canta un gallo. ¿Cuál era la prisa, irse de vacaciones? ¿De a como estuvieron los cañonazo$? ¿Qué les costaba a los senadores haber revisado todo el documento en inglés ese que les mando Donald Trump por vía de su yerno Yared Kussner? … Francamente, esos 111 senadores merecen ser juzgados como traidores a la patria, igual que el inquilino de Palacio Nacional y sus “achichincles” disque negociadores.
Hoy, el pastor de los senadores de Morena, el siempre marrullero Ricardo Monreal Ávila justifica su torpeza diciendo: “es inaceptable que hayamos aprobado, lo que aprobamos”.
A propósito, ¿Por qué no figura entre esos negociadores estrellas del Tratado de Libre Comercio, la titular de economía Graciela Marqués, la frangollada señora que todavía no renueva su guarda ropa para representar a México?
Hasta los niños saben que el gobierno de AMLO, los senadores y “negociadores” fueron “chamaqueados” y les metieron clandestinamente el asunto de los agregados y supervisores laborales. ¿Ellos creerán que les creemos y que la simulación política que llevan a cabo fue un término clandestino que les recetaron los malvados gringos aprovechando que el gobernante disque de la “cuarta trasformación” resulto más suave y servil a los gringos que la seda?