El arte en el Metro
¬ Salvador Estrada jueves 3, Oct 2019Folclor urbano
Salvador Estrada
El Sistema de Transporte Colectivo, mejor conocido como Metro, acaba de abrir una “galería pública”, en el andén, pasillo o corredor, como quiera que se le llame, en donde se da a conocer un nuevo arte, en la estación Hidalgo.
Los usuarios cotidianos han visto cómo ese pasillo que lleva a la conexión o trasborde para el Metro Taxqueña-Cuatro Caminos, se ha ido transformando y como toda la estación se ha llenado de luz.
Puestos de tortas, chucherías, de ropa, de refrescos, papas, alegrías y otros similares, fueron desalojados porque ese paso estorbaba a los pasajeros para trasladarse a la parte baja y abordar el metro a Taxqueña o Cuatro Caminos.
La ausencia de esos comercios permitió el caminar más rápido y sin “chocar” o estorbarse en ese pasillo, pero este camino “libre de puestos” no duró mucho tiempo y nuevamente volvieron los negocios con la construcción más moderna de accesorias para “el business” en donde Telmex tenía el espacio más grande, y de siete se quedó con tres.
Pero, en un amanecer los usuarios de esa línea vieron que todos esos locales fueron cerrados y que los muros laterales se tapiaron y después de dos meses, vieron en esos lugares pinturas murales y en el pasillo que va a la salida Reforma Balderas se abría la Galería Pública, donde un nuevo arte hacia su aparición.
En toda la estación se instalaron luces blancas y le dio un nuevo aspecto al corredor, lo mismo que el paso a Reforma Balderas, en donde cambiaron el piso, que ya olía a orines, y en donde ahora lo feo son las escaleras, se les olvidó cambiar el piso y se ve sucio, cochino, mugroso y esos peldaños son el camino a la galería pública.
Esta galería se llama ”Involuntary México, movimiento que nace de Involuntary Paintin y Sculpture, creado por los artistas británicos
Millree Hughes y PaulConnealy”.Y lo que se ve son cuadros, más de cincuenta, colgados a lo largo del pasillo, que son fotografías gigantes de pedazos de fierros, chimeneas abandonadas, tanques de agua de fábricas viejas, árboles secos ,tirados, y así por el estilo e independientemente de que sea un nuevo arte, quienes caminan por esa galería van con el tiempo contado y con sus prisas, no se detienen a ver, contemplar, “esos cuadros de arte nuevo”.
Y los muros laterales del corredor de ese metro están pintados con otro estilo, que da para todos los gustos, pero también porque los viajeros tienen prisa no los admiran y se siguen de largo.
Las autoridades capitalinas quieren llenar de arte la ciudad y en algunas alcaldías se prestan los frentes de construcciones para que los “artistas urbanos” se den vuelo.
Los capitalinos deben conocer toda la cultura que tienen las estaciones del Metro, por ejemplo: en la estación Bellas Artes, se pueden apreciar copias de las esculturas mayas y olmecas y para saber más se deben organizar una tour por ellas, los domingos, para que sin prisa las puedan admirar.