La publicidad sí hace fumar a los adolescentes: estudio
Mundo lunes 24, Ene 2011- En Estados Unidos los anuncios de cigarrillos están prohibidos en la vía pública, la televisión, la radio, y son raros en las revistas
Los adolescentes que suelen quedar expuestos con frecuencia a los iconos del consumo de tabaco, como el vaquero de Marlboro, serían más propensos a empezar a fumar, según un estudio realizado en Alemania.
A diferencia de los anteriores, el estudio refuerza la relación entre las publicidades de cigarrillo y el tabaquismo adolescente al mostrar que esos avisos ejercen influencia a diferencia de otros.
El doctor James Sargent, de la Escuela de Medicina de Dartmouth, en New Hampshire, dijo que siempre existió la duda sobre si los estudios previos sólo habían identificado a los niños susceptibles a toda inducción conductual, como las imágenes publicitarias en general.
“Este estudio prueba que son las imágenes de los avisos de tabaco que predicen el tabaquismo”, dijo Sargent.
El equipo de Sargent estudió a más de 2 mil adolescentes que nunca habían fumado. Les mostraron avisos de seis tipos de cigarrillos distintos y de otros ocho productos comerciales sin información alguna sobre las marcas.
Luego, el equipo le preguntó a cada participante con qué frecuencia había visto cada imagen y si podría identificar la marca representada.
Durante los nueve meses de seguimiento, el 13 por ciento de los adolescentes comenzó a fumar, publicó el equipo en la revista Pediatrics. Y a mayor exposición a las publicidades de tabaco en el pasado, mayor posibilidad de que adoptaran la adicción.
Aun tras considerar otros factores que podrían elevar el riesgo de que un niño comenzara a fumar, como la edad, el sexo, el ingreso familiar, el rendimiento escolar y tener un padre/madre o amigos fumadores, el tercio de los participantes con mayor exposición a las publicidades y reconocimiento de las marcas corría un 50 por ciento más riesgo de empezar a fumar que el tercio inferior en esa misma escala.
La exposición a publicidades de otros productos, como dulces, dentífrico, teléfonos celulares y automóviles, no los volvieron más susceptibles a comenzar a fumar.
“Las tabacaleras saben cómo lograr que los niños reaccionen con una publicidad que modificará su conducta”, dijo Thomas Glynn, de la Sociedad Estadounidense del Cáncer, quien no participó del estudio.
Casi un cuarto de los estudiantes secundarios de Estados Unidos fuma cigarrillos, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC). La adolescencia es también el período en el que se desarrolla la identidad independiente de los padres y otros modelos de roles, explicó Sargent.
“Los adolescentes lo hacen probando con lo que ven que otros hacen. Fuman, en parte, por cómo ven a otros fumadores y por lo que piensan que fumar hará por ellos. Por ejemplo, un adolescente empezaría a fumar para parecer más masculino, como el personaje de Marlboro”, indicó.
Además, las publicidades de cigarrillo inducirían expresa o sutilmente a asociar el tabaquismo con la atracción sexual, la independencia o la delgadez en las adolescentes.