Sube presidente de Francia salario mínimo, por protestas
Mundo martes 11, Dic 2018- Alza de 100 euros al mes, desde 2019
- Exhorta Emmanuel Macron a empresas a dar bonos a empleados
El presidente francés, Emmanuel Macron, prometió un alza de 100 euros al mes en 2019 en el salario mínimo, reducir impuestos y exhortó a las corporaciones a dar bonos a sus empleados en medio de las recientes protestas contra sus medidas económicas.
En un discurso, el mandatario calificó de inaceptable la violencia suscitada el último mes y prometió tomar toda medida necesaria para restablecer el orden.
Particularmente prometió derogar un aumento de impuestos que hubiera afectado a la gente de menores recursos y a los pensionados. “Responderemos a la urgencia económica y social con medidas sólidas, reduciendo los impuestos más rápidamente, manteniendo nuestros gastos bajo control, pero no con un giro en ‘u’”, dijo.
El discurso tuvo lugar después de protestas radicalizadas y violentas contra su gobierno y un silencio que agravó la furia. Macron anunció una serie de medidas para reducir impuestos y estimular el poder adquisitivo de las masas que sienten que su presidencia ha favorecido a los ricos.
Se ha visto forzado a actuar luego de cuatro semanas de protestas que comenzaron en provincias atribuladas y se extendieron a disturbios en la capital que han asustado a turistas e inversionistas extranjeros y sacudido a ese país.
Macron se reunió el lunes en el Palacio Presidencial con políticos locales y nacionales, sindicatos y representantes empresariales para escuchar sus preocupaciones. En discurso televisado hizo sus primeras declaraciones públicas en más de una semana.
Entre los pasos que pondera el gobierno están la abolición de impuestos sobre tiempo extra, acelerar los recortes de impuestos y una bonificación de fin de año para los trabajadores de bajos ingresos.
El ministro de Finanzas, Bruno Le Maire, dijo ayer lunes que el gobierno pudiera demorar algunos impuestos sobre la nómina, pero expresó renuencia a restaurar el impuesto sobre riqueza y reducir los impuestos a los jubilados, entre las demandas de los manifestantes. Resaltó que las medidas deberían centrarse en ayudar a la clase trabajadora.
“Estamos preparados para hacer cualquier gesto (que funcione)”, le dijo a la radio RTL.
“Lo importante es ahora poner fin a la crisis y encontrar paz y unidad de nuevo en el país”.
Dijo que las secuelas de las protestas hasta ahora pudieran costarle a Francia 0.1 por ciento de su Producto Interno Bruto en el último trimestre del año.
“Eso significa menos empleos, menos prosperidad para todo el país”, dijo. La semana pasada, Macron canceló un alza al impuesto a los combustibles, el punto que desató las protestas a mediados de noviembre, en un intento por apaciguar a los inconformes, pero la medida fue considerada tardía.
Para muchos manifestantes, Macron mismo, al que muchos consideran arrogante y desconectado de los franceses de la calle, se ha convertido en el problema.
Las exigencias para que renuncie a la presidencia proliferaron el sábado, el cuarto fin de semana de protestas multitudinarias.