El Jaguar de Ira
¬ José Antonio López Sosa lunes 13, Ago 2018Detrás del Poder
José Antonio López Sosa
Pismo Beach, California.- A veces, creemos que por una persona, una noticia o una tendencia de pensamiento, conocemos o creemos conocer a las personas en los Estados Unidos de América, nuestros controvertidos vecinos del norte.
Fui invitado por Visit California en México a la reapertura de la carretera 1, en el tramo de Monterey a San Luis Obispo, ese espectacular camino entre acantilados, valles y vistas espectaculares del océano Pacífico. El recorrido fue en carros antiguos para conmemorar los años que ha conectado este camino a los pueblos en California.
Me tocó ir con Ira Zalesin en su Jaguar 1989, convertible y de 12 cilindros. Tuvimos varias horas para conversar, admirar el camino y conocer un poco de nuestras historias.
Anglo Sajón, un hombre exitoso dedicado a la tecnología, que tuvo 15 carros antiguos de colección y ahora tiene ocho. Casado sin hijos, era su primer salida en varios años, tras cuidar de su esposa por una enfermedad seria, de la cual se ha recuperado satisfactoriamente, comenzó con un comentario muy cortés, cuando le aseguré que no muchos mexicanos conocían esta carretera, “deberían, porque hace años esto era México” -me dijo con una sonrisa-.
Pude conocer un poco de la forma de ver la vida de un hombre nacido en Nueva York, que desde los años setenta migró a California y cuyo acercamiento con México tiene décadas y sólo fue en Puerto Vallarta y Cancún.
Detrás de ese estadounidense exitoso, encontré a un ser humano, que más allá de la condición racial o económica, vive sin prejuicios racistas o anti-inmigrantes, soprendente en un momento en que ambos temas son un problema, no sólo para quienes visitamos los Estados Unidos, sino para quienes viven ahí, sean migrantes hispanos o no.
Me preguntó sobre México, conversamos sobre la historia, la política, la economía y hasta el tequila, por cierto, compartimos el gusto por la marca Herradura.
Además de participar en la reapertura de esta carretera, de la cual comentaré en las siguientes entregas, así como la importancia turística y económica para la región, me quedo con la oportunidad de conocer a una persona estadounidense, sin conexión directa con nuestra cultura, que me mostró a ese otro segmento de personas en la Unión Americana, fuera de la ignorancia y el racismo, de esos gringos que hay muchos y también representan parte importante de este país.