Intervención a la vista
¬ Claudia Rodríguez lunes 29, Nov 2010Acta Pública
Claudia Rodríguez
Pese a que algunos de los capos de la droga han anunciado que se tomarán un receso, el hecho es que la violencia que se vive en México, no toda proviene de ese ramo delictivo, también hay quienes advertimos que otros hechos criminales pueden tener un origen distinto.
¿Recuerda usted aquellos carros bomba que detonaron en Ciudad Juárez, Chihuahua y en Ciudad Victoria, Tamaulipas, apenas en los meses de julio y de agosto de este año?
Especialistas aseguran respecto a lo anterior, que el estallamiento de vehículos en zonas urbanas, no es la forma común de operar de los cárteles del narcotráfico y mucho menos de grupos con reivindicaciones políticas, por lo que se atreven a decir que su origen puede en primera no ser nacional y sí de corte estadunidense.
El hecho de que las autoridades de los Estados Unidos insistan en afirmar que en México está presente la narcoinsurgencia no está desligado del interés que ellos mismos tienen en poner un control más férreo a los criminales de altos vuelos, ya que el descontrol que sobre el asunto del narcotráfico se genere desde México, es directamente perjudicial para ellos en muchos terrenos, no sólo de su agenda política, sino incluso en tanto a la seguridad de los estadounidenses.
Llama la atención poderosamente cómo hoy en día, la mayoría de los criminales capturados por las autoridades, con una gran facilidad detallan sus delitos y culpas y claro, desatan una cacería en doble sentido: La persecución por parte de las autoridades y el cobro de venganza por parte de los delatados o su grupo.
El caso es que existen varios elementos para que de forma más que tangible, los Estados Unidos mande presencia y acción de sus fuerzas represoras a darle otro curso a la “guerra contra el narcotráfico” en México, dictada desde los gobiernos de Washington.
Si ver en las calles a convoyes de patrullas y del propio Ejército Mexicano y en muchos otros casos de la Armada, promueve más a sentirse inseguro que lo contrario, ya estoy imaginando que será toparnos de forma cotidiana con marines estadounidenses u otros cuerpos de justicia de nuestra vecina nación del norte.
Si lo anterior llegara a ocurrir, tengamos por seguro que la agenda de la política nacional ya no será más nuestra.
No son pocos quienes apuntan que para los Estados Unidos nos estamos convirtiendo en una verdadera amenaza para su estabilidad y por lo tanto, una intervención militar estadounidense, no es asunto utópico, ni mucho menos.
Acta Divina… Apenas el viernes anterior, el senador panista Santiago Creel Miranda, señaló frente a varios hombres de negocios que él cuenta con una forma distinta y concreta para combatir la inseguridad para que en 24 meses se reviertan los actuales índices de inseguridad que se viven en el país. Mas aclaró que para ello se requiere un gobierno fuerte y por eso propuso que en el 2012, quien gane la Presidencia de la República pueda instituir un gobierno de coalición con otras fuerzas políticas.