AMLO anhela e impulsa regresar al pasado
Jorge Luis Galicia Palacios lunes 6, Mar 2017Como veo, doy
Jorg Palacios
- Una sola voz, un solo mensaje y una sola idea, el proyecto
- Perpetuarse en el poder y aparecer como Dios todopoderoso, el sueño
“Sí, vamos a regresar al pasado. Claro que queremos regresar al pasado, y vamos a regresar”, así de contundente fue la expresión de Andrés Manuel López Obrador luego de que el presidente Enrique Peña Nieto advirtió que el país está “en grave riesgo de retroceso y de perder lo que hemos construido en las últimas décadas”.
En ese contexto, lo que tal vez quiso decir el de Tabasco es que quiere regresar al esquema educativo donde los dirigentes de la CNTE mandaban y hacían lo que querían en aras de la educación; quiere regresar al pasado para volver a engañar a los jóvenes, ya que cuando él fue jefe de Gobierno del Distrito Federal sólo los entretuvo con programas sociales sin antes darles una oportunidad de empleo; quiere regresar al pasado para que el sector energético nuevamente pase a manos de la iniciativa privada, como sucedía antes de la expropiación petrolera; y regresar al pasado, para que el sector telecomunicaciones vuelva a operar con esquemas monopólicos y lejos de los avances tecnológicos.
Ese es el pasado que propone Andrés Manuel López Obrador en caso de ganar la Presidencia.
Al encabezar el 88 aniversario de la fundación del PRI, Peña Nieto señaló que “si algo quedó demostrado en enero de este año, es que la oposición sigue sin estar lista para ser gobierno. Sin distinción de colores, exhibieron su oportunismo político, demandando subsidiar a la gasolina. Con ello evidenciaron su total desconocimiento de las finanzas públicas del país, su falta de visión de Estado, o simple y llanamente que están dispuestos a sacrificar la estabilidad económica del país para ganarse un aplauso y un respaldo fácil”.
Y remató su idea con estas palabras “hoy nuevamente hay riesgos de retroceso. Al igual que hace seis años, están resurgiendo las amenazas que representan la parálisis de la derecha, o el salto al vacío de la izquierda demagógica”
El mensaje fue dirigido a una izquierda demagógica y a una derecha que representa la parálisis política, y por el apresuramiento en su respuesta, quedó evidenciado que a quien le quedó el saco de esa izquierda fue el líder nacional de Morena, AMLO, quien de inmediato respondió al mensaje presidencial. Ora sí que, como dicen en el Congreso de la Unión, por alusiones personales, manifestó que de ganar su movimiento en las elecciones presidenciales de 2018, “vamos a regresar al pasado, claro que queremos regresar al pasado”.
Y, argumentó su pretensión de querer regresar al pasado, señalando que “lo que está en riesgo es la educación de calidad que merecen nuestros niños. Lo que está en riesgo es que nuestros jóvenes encuentren un empleo, como hoy sí lo están haciendo. Lo que está en riesgo es la modernización de nuestro sector energético y de telecomunicaciones, el acceso a créditos baratos y la estabilidad misma de la economía nacional”.
En Jiutepec, Estado de México, el líder de Morena, aseguró que cuando su movimiento triunfe, la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos será modificada para que quede tal y como fue escrita en el año 1917.
Tal vez querrá tener una Constitución a modo para, en caso de ganar, tratar de perpetuarse en el poder en un intento más por emular ideológicamente al ex presidente venezolano, ya fallecido, Hugo Chávez.
VA MI RESTO.- No es la primera vez que López Obrador grita a los cuatro vientos su pretensión de llevar al país de regreso al pasado, ni tampoco la primera vez que manifiesta su intención de iniciar la construcción de nuestro país a partir del texto constitucional de 1917.
También en la localidad de Jiutepec, pero en el Estado de Morelos, el mes de marzo de 2015, adelantó que “al triunfo de nuestro movimiento vamos a dejar la Constitución como estaba, como la escribieron los Constituyentes en 1917, se va a volver al Artículo Tercero como estaba originalmente, al artículo 27, al artículo 123”.
Para eso quiere regresar al pasado, quiere detener el avance institucional, así como el desarrollo económico y social que durante cien años han existido en el país, porque para una reconstrucción y transformación nacional solo su voz.
Sólo hay que recordar que en 1917 las compañías petroleras estaban en manos de los extranjeros (el artículo 27 constitucional daba la facultad al Estado de otorgar concesiones a particulares, nacionales y extranjeros, para explotar el subsuelo y obtener sus recursos).
En 1917, según reza en el texto original de nuestra carta Magna, las mujeres no sentían necesidad de participar en los asuntos públicos, es decir no tenían derecho a voto.
Es a esa época a la que le urge regresar el llamado pejelagarto. Quiere partir de cero para en la modernidad tener algo que proponer y en su sueño busca reescribir la historia con su nombre por delante, eso es lo que en verdad pretende, que se le recuerde como a un dios todopoderoso. Así de simple es su propuesta de querer para México un regreso al pasado.
No hay duda, AMLO quiere el regreso al país de un solo hombre, un solo partido, una sola voz, un solo pensamiento. Ese es el país que anhela, y en una de esas hasta nos dice que quien lo aconseja es “un pajarito”, y hasta ahí porque como veo, doy.