“Agárrenlo”, eco destinado al diputado federal Antonio Tarek
Jorge Luis Galicia Palacios lunes 14, Nov 2016Como veo, doy
Jorg Palacios
- Habitantes del Distrito XVII de Veracruz se dicen engañados
- Veracruzanos no quieren “otro prófugo de la justicia”
“Allá va, hay que agarrarlo”, es la expresión que últimamente surge de improviso toda vez que el diputado federal, Antonio Tarek Abdalá Saad, se deja ver por el Palacio de San Lázaro y la expresión surge no precisamente de las autoridades de la PGR, no, porque tiene fuero y por ese motivo no lo pueden detener, son los representantes de los medios informativos quienes tienen interés de atraparlo para una entrevista y que diga, si es que hay algo qué decir en su defensa, lo que quiera en torno a los desvíos de recursos públicos por los que se le acusa junto con el ahora prófugo de la justicia, el gobernador con licencia, Javier Duarte de Ochoa.
Hasta donde se sabe, las acusaciones que pesan sobre el legislador veracruzano son por la presunta desviación de recursos destinados a Educación y Salud, de más de 300 millones de pesos, y por ese motivo el ex tesorero de la Secretaría de Finanzas y Planeación del gobierno veracruzano y amigo cercano del ex gobernador Javier Duarte, fue inhabilitado por 10 años para desempeñar un cargo en el servicio público ó la administración estatal.
El proceso de sanción administrativa en contra de Tarek Abdalá, representante popular por el Distrito 17 del Estado de Veracruz, fue resultado de la investigación que realizó la contraloría veracruzana, luego de las irregularidades que reportó la Auditoría Superior de la Federación (ASF) en la auditoría 799 practicada con motivo de la Fiscalización de la Cuenta Pública del Ejercicio 2013 y aunque es hasta ahora que se da a conocer el resolutivo, al parecer fue en el mes de septiembre del año en curso cuando se notificó del mismo al inculpado.
> Aunque los reporteros atrapen al legislador federal para tomarle su punto de vista, es obvio que para efectos de defensa pública Antonio Tarek dirá hasta el cansancio que es inocente y que está en la mejor disposición para presentarse ante las autoridades correspondientes para que se deslinden responsabilidades al respecto, lo mismo decía su ex jefe y amigo Javier Duarte de Ochoa, pero éste último ahora es prófugo de la justicia y esa historia podría repetirse con el todavía diputado federal si no se somete a juicio político para desaforarlo y tener desde ahora un seguimiento especial por parte de las autoridades competentes para evitar su fuga.
Es cierto, en léxico de la justicia “nadie es culpable hasta que no se le demuestre lo contrario”, pero también hay un dicho que en términos de la abogacía señala que “a confesión de parte, relevo de pruebas”, y esta última máxima aplica muy bien para el ex tesorero de la Secretaría de Finanzas y Planeación de Veracruz, quien también fue director de Administración del DIF en la misma entidad entre 2010 y 2012, porque entre las pocas declaraciones que ha dado a la prensa admitió que más de 300 millones de pesos de un subsidio federal de salud se canalizaron para otras partidas de atención prioritaria de la administración estatal, aunque matizó su dicho al señalar que solo cumplía con una política de gasto establecida por el gobierno encabezado por Duarte de Ochoa.
Y en tanto se resuelve la situación jurídica de Antonio Tarek, en las filas del priísmo estatal y también en el escenario nacional, sus dirigentes ven como insostenibles los argumentos del legislador federal porque lejos de fortalecerlos con sus votos en la bancada parlamentaria del PRI, hay muchos señalamientos que piden su cabeza, primero retirándole sus derechos partidistas y después impulsando su desafuero para que su compañero de bancada haga frente a los señalamientos judiciales pero de manera individual y muy, pero muy lejos de su hasta ahora partido, en caso contrario (dicen) la imagen del priísmo se seguirá deteriorando con asuntos de corrupción.
VA MI RESTO.- El XVII Distrito Electoral Federal de Veracruz, en donde Antonio Tarek Abdalá Saad fue electo para formar parte de la LXIII Legislatura de la Cámara de Diputados, es uno de los 300 Distritos Electorales en los que se encuentra dividido el territorio de México y uno de los 21 en los que se divide el Estado de Veracruz. Su cabecera es la ciudad de Cosamaloapan.
En 2005 la entidad veracruzana tuvo un proceso de redistritación, por lo que el Distrito XVII se encuentra ubicado en el extremo sureste del estado, formándolo por los municipios: Jamapa, Medellín, Cotaxtla, Tlalixcoyan, Ignacio de la Llave, Alvarado, Ixmatlahuacán, Cosamaloapan, Tacojalpan, Otatitlan, Tres Valles y Tierra Blanca.
Por supuesto que los habitantes de todas esas comunidades se sienten nada orgullosos de la fichita que eligieron como diputado federal, porque aunque el periodo de pruebas y defensa del legislador apenas comienza, muy pocos, poquísimos de sus paisanos creen en su inocencia, e incluso piden que no solo le sea retirado el fuero sino que, antes de que vaya a la cárcel, quieren que restituya a los veracruzanos lo que a su casa se llevó.
“Agárrenlo” también se oye decir por allá, ahora falta ver si este eco llega hasta la PGR, y hasta ahí porque como veo, doy.