AMLO le entra personalmente a la pelea
Roberto Vizcaíno lunes 27, Sep 2010Tras la puerta del poder
Roberto Vizcaíno
Carlos Navarrete, quien era el interlocutor de Nueva Izquierda o Los Chuchos ante AMLO, dice: en una desafortunada contradicción, la virtud y defecto de López Obrador, es que sólo puede ver y entender las cosas en blanco y negro
Al inicio de este septiembre envió a los suyos a plantear la inmediata remoción de Jesús Ortega. Lo explicamos en este espacio. A Andrés Manuel López Obrador se le hizo urgente quitar a Ortega y abatir el liderazgo de Los Chuchos en el PRD en el país, para hacer abortar el impulso aliancista del PRD junto al PAN de Felipe Calderón, luego de la euforia derivada de los triunfos en Oaxaca, Puebla y Sinaloa, y los resultados sorprendentes de Hidalgo y Durango.
Dejar que las alianzas fructifiquen sería permitir la cancelación de su propia participación en la presidencial del 2012.
Así de simple.
¡Ni modo que se pusiera del lado de los aliancistas para luego ir a buscar la candidatura común convenida por Jesús Ortega y Felipe Calderón! ¡Bonito se iba a ver haciendo eso!
Por eso, Andrés Manuel López Obrador lanzó a Dolores Padierna -esposa de René Bejarano-, que ahora comanda la tribu Izquierda Democrática Nacional (IDN) y otras 7 corrientes ha hacer el trabajo sucio, es decir, la guerra a Ortega.
Pero los primeros embates no tuvieron efecto por más que a la señora Padierna la acompañaron los dirigentes de las corrientes Democracia Social, encabezada por el senador Carlos Sotelo; Izquierda Social, de Martí Batres; Red de Izquierda Revolucionaria o Redir, que dirige Camilo Valenzuela; Red de Unidad Nacional de las Izquierdas o RUNI que comanda Saúl Escobar; Unidad y Renovación o UNyR, de Gilberto Ensástiga; Grupo de Acción Política o GAP, de Horacio Duarte y Horacio Martínez y el Frente Amplio Revolucionario Socialista o FARS.
Para no pocos era previsible este fracaso, pues Nueva Izquierda que lideran al alimón desde hace más de una década Ortega y Jesús Zambrano, es la corriente que controla la mayoría de los cargos de estructura de este partido a nivel nacional, y en la mayoría de los estados y municipios, así como dentro del Consejo Político Nacional, donde Los Chuchos tienen quizá el 70 por ciento de los asientos, mientras que los lopezobradoristas apenas suman quizá un 25 por ciento.
Frente a este nuevo embate pejista, y el avance de nuevas alianzas que advierten que Los Chuchos podrían llegar a finales de 2011 con una negociación conjunta para lanzar candidato común PAN-PRD para la Presidencia de la República, y que éste pudiera ser Marcelo Ebrard o un candidato ciudadano como el ex rector Juan Ramón de la Fuente, u otro, hacia finales de la semana pasada Lázaro Cárdenas salió y dijo que le gustaría ser el próximo líder del PRD.
Para quienes militan en la izquierda mexicana y no están ni con Los Chuchos blanquiazules ni con López Obrador, el pronunciamiento del ex gobernador de Michoacán e hijo del creador y fundador del PRD, representa el mejor de los anuncios para ir por el rescate de esta izquierda, la reestructuración del Partido de la Revolución Democrática y el relanzamiento de un proyecto progresista a través de una tercera vía.
La inserción de Lázaro en la contienda de AMLO contra Los Chuchos tuvo su efecto.
Obligó a Andrés Manuel a rebasar por encima el embate de Dolores Padierna y su grupo y lanzarse él mismo a asumir el combate de Los Chuchos.
Esto ocurrió hacia fines de la semana pasada cuando en alguno de los primeros municipios que recorre en el Estado de México, pidió a Los Chuchos abandonar al PRD y afiliarse de una vez por todas al PAN de Felipe Calderón.
No dejó dudas al indicar que no hay posibilidad de ir a una alianza en el Estado de México entre el PRD y el PAN, porque eso sería avalar el robo de la Presidencia ocurrido en 2006.´
Y entonces dijo: “¡Al carajo con sus alianzas!”.
Esta misma posición la reiteró luego a lo largo de sus otras visitas durante los siguientes días.
“Si no tienen dignidad los dirigentes del PRD, nosotros les vamos a enseñar que los de abajo, los militantes y simpatizantes no queremos pacto con el PAN…
“No tendríamos vergüenza si hay una alianza con el PAN que hace cuatro años nos robó la Presidencia… y hay que tener dignidad”, precisó.
López Obrador, quien se tiene propuesto recorrer los 125 municipios del Estado de México quizá hasta fines de este 2010, dentro del proceso de selección de candidato a gobernador, indicó que lo mejor será que haya un candidato de unidad entre PRD, PT y Convergencia, pero sin darle posibilidad alguna al PAN de Felipe Calderón.
No dijo nombres, pero es obvio que este candidato del que habla sería Alejandro Encinas, hoy coordinador de los 71 diputados federales del PRD y su sucesor en la jefatura de gobierno del DF cuando él se fue como candidato presidencial en 2006.
Para decirlo directo y claro: lograr la candidatura de Encinas sería avalar la suya, y cerrarle la posibilidad a la de Marcelo Ebrard.
Obstinado, López Obrador ya adelantó que si Los Chuchos insisten en ir a las alianzas, entonces él continuará con sus llamados a las bases de forma tal que los de Nueva Izquierda sólo se quedarán con el cascarón del PRD, mientras que su movimiento sumará a los perredistas de base.
En respuesta a este ingreso personal de López Obrador en la guerra contra Ortega y contra las negociaciones de más alianzas electorales con el PAN de Calderón, el senador Carlos Navarrete -quien era el interlocutor directo de Los Chuchos con AMLO hasta que se aprobó la Reforma Energética-, le indicó al tabasqueño que si fractura al PRD volverá a perder la Presidencia.
Señaló que, en una desafortunada contradicción, la virtud y defecto de López Obrador es que sólo puede ver las cosas en blanco y negro.
“Nadie puede ignorar que Andrés Manuel ha sido un factor importante de lo ocurrido en los últimos cuatro años al interior del PRD.
“Es un hombre de claroscuros; con olfato y convicciones a prueba de fuego, pero también un personaje que polariza; es ave de tempestades, hombre que suele pensar en blanco y negro, que no acepta medias tintas ni mediaciones… es (su) visión y defecto”, precisó.
La cuestión es, dice Navarrete -también del primer cuadro de Nueva Izquierda o Los Chuchos-, que el PRD ya demostró que puede resurgir en el 2012 siempre y cuando lo haga unido.
“Quien crea en este momento que fracturar al PRD, dividirlo, ahondar las discrepancias internas, es la mejor forma de presentarse exitosamente en 2012, comete un grave error de apreciación”, indica en obvia referencia a la evidente decisión de López Obrador de meterse personalmente en la pelea por la dirigencia del partido del sol azteca y por el desplazamiento de Jesús Ortega.
LA ESTRUCTURA DE CALDERÓN: Hay una reiterada convicción de que Felipe Calderón es capaz de cometer los peores e impensables actos. Entre priístas del más alto nivel, hay la convicción de que el actual Presidente de la República estaría dispuesto incluso a un “fujimorazo” con tal de no entregarle el poder a un priísta, fuese Enrique Peña Nieto o cualquier otro.
¡Claro!, antes -dicen-, intentaría otras muchas cosas, como lanzar a la PGR u otra dependencia contra quien crea conveniente para disminuir las posibilidades del PRI.
Esta percepción está peleando ahora mismo en otra fuerzas políticas. Dentro de la dirigencia nacional del PRD hay la convicción de que el llamado michoacanazo realizado hace un año y que llevó a unos 30 funcionarios y alcaldes de Michoacán a la cárcel, forma parte de un operativo inmoral de Calderón para criminalizar a militantes y funcionarios del PRD con miras a debilitar a este partido y hacer viable la candidatura de su hermana, Luisa María de Guadalupe Calderón Hinojosa a la gubernatura de Michoacán en las elecciones de fines de 2011.
Dentro de esta intención se encuadra la escalada y persecución del ahora diputado federal Julio César Godoy Toscano, quien ha ganado ya 4 juicios a la PGR de Calderón y la que ya le abrió un quinto proceso bajo los mismos cargos de vinculaciones con el narcotráfico.
Los juicios contra el hermano de Leonel Godoy, gobernador de Michoacán, se originan en una acusación de un testigo protegido que formó parte del cártel denominado La Familia Michoacana, quien dijo haber escuchado una llamada telefónica de Servando Gómez Martínez, mejor conocido como “La Tuta”, a Julio César Godoy, quien ha sido alcalde del municipio Lázaro Cárdenas.
El caso es que de los 30 detenidos en el llamado michoacanazo, ya fueron liberados 26 por falta de pruebas. Es decir, la PGR los acusó y detuvo sin estar realmente involucrados en lo que se les imputó. Uno de ellos es Julio César.
Hoy, Juan Ignacio Zavala, cuñado de Calderón, se refiere a Julio César Godoy como dipunarco en lo que más bien parece la continuación de una campaña de desprestigio y acoso a un perredista al que no se le ha probado hasta ahora de lo que se le acusa.
Lo evidente es que desde el Pemexgate y ahora el michoacanazo”, los panistas en el poder han demostrado poca moral y cero ética en el manejo de las instituciones de justicia para actuar en contra de sus opositores políticos e ideológicos. Y, bueno, la hermana de Calderón, Luisa María, quiere ser gobernadora de Michoacán a partir de las elecciones de 2011, cargo que por cierto perdió el ahora presidente en 1995 frente al priísta Víctor Tinoco Rubí.
Si de evidencias hablamos, pues ésta es más fuerte que la de Julio César como narco.