Contribuye ISSSTE al rendimiento escolar en niños
Nacional* lunes 24, Ago 2015- “Un desayuno de 10”
Un desayuno nutritivo y balanceado evita que el cerebro sufra un desabasto de azúcar durante las primeras horas del día, con lo que el organismo se llena de energía y por consecuencia hay un mejor rendimiento escolar, destacó el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE).
Explicó que el desayuno es romper el ayuno que llevamos después de las horas de sueño y si el organismo no recibe el suministro de necesario de glucosa o azúcar el cerebro sufre un desabasto.
En su infografía “Mándalo a la Escuela con un desayuno de 10”, publicada en el apartado de Nutrición y Ejercicio del portal www.prevenissste.gob.mx, advirtió que en esas condiciones, los alumnos presentan sueño, falta de atención y en casos severos desmayos.
Señaló que si los primeros alimentos del día tienen un contenido altamente calórico, además de que contribuyen al sobrepeso y obesidad, también se puede presentar falta de atención y sueño porque el organismo requiere una gran cantidad de energía para el proceso de digestión.
En ese sentido, explicó que un desayuno correcto debe incluir los tres grupos de alimentos.
Entre las opciones que sugirió, destacan fruta con yogurt natural y granola; un vaso pequeño de jugo de fruta natural y una quesadilla de queso oaxaca; dos rollitos de jamón de pavo y tres cucharadas de arándanos secos.
“En este regreso a clases, ayuda a que tus hijos se alimenten mejor”, indicó el instituto, que también sugirió a los derechohabientes a comunicarse a la línea PrevenISSSTE, en donde una nutrióloga brinda orientación sobre los alimentos adecuados para las primeras horas de la mañana.
La empresa de alimentos Pinsa refiere que según la Facultad de Medicina de la Universidad de Chicago, para las niñas y niños de entre siete y 10 años de edad, lo recomendable es que ingieran 70 kilocalorías diarias por kilogramo, y 28 gramos de proteínas al día.
Subraya que las necesidades de energía varían de un niño a otro, de acuerdo con su propio ritmo de crecimiento, actividad física y tamaño corporal.