La ruta de Alejandra Barrales

Ramón Zurita Sahagún jueves 12, Ago 2010

De frente y de perfil

Ramón Zurita Sahagún

Si una política tiene bien trazada su ruta, es Alejandra Barrales, la polémica presidenta de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal.

El camino que recorre lleva como destino convertirse en la sucesora de Marcelo Ebrard Casaubón en el gobierno capitalino, previa escala de la candidatura de su partido al cargo.

Barrales está siendo bien asesorada, por lo que camina con paso firme en la búsqueda de sus propósitos y avanza considerablemente, aunque no esté considerada, en la actualidad, como la primera opción de su partido para la candidatura anhelada.

Ayer mismo, la perredista se anotó otro punto favorable con la presentación de la propuesta de reforma política para la ciudad de México, presentada ante la Junta de Coordinación Política del Senado de la República.

En ella se establecen, entre otros puntos, facultades para que el jefe de gobierno pueda remover de sus cargos a los titulares de la SSP y de la Procuraduría General de Justicia, situación que corresponde en la actualidad Presidente de la República.

Dentro del cúmulo de modificaciones resaltan el que la Asamblea Legislativa tenga las mismas atribuciones que los congresos de los estados, al igual que al Poder Judicial.

La propuesta de los diputados locales intenta dar facultades extraordinarias para la capacidad de endeudamiento del gobierno capitalino, hasta ahora controlada por el Congreso federal.

El intento de los integrantes de la ALDF es bueno y de resultar aprobado sería un punto favorable para el futuro de Barrales.

Y es que la ex lideresa de las sobrecargos despunta favorablemente para su partido, aunque la práctica común del canibalismo dentro de las filas perredistas puede ser uno de los grandes obstáculos que tendrá que enfrentar en su ruta ascendente.

Eso no parece ser una roca para sus aspiraciones políticas, toda vez que durante su no tan largo paso por esta actividad se tuvo que enfrentar a otros retos que ha podido solventar, algunos de ellos con dificultades.

Barrales ha sido objeto de campañas negras en su contra, desde supuestos fraudes, falsificación de documentos, declaraciones patrimoniales falsas, pasando por una supuesta falta de capacidad para la actividad política.

Cada uno de los argumentos en su contra han caído por su propio peso, ya que el supuesto fraude contra el gremio de aeromozas (por 14 millones de pesos) se evaporó pronto. La supuesta presentación de un acta de nacimiento falsa sobre su origen michoacano tampoco procedió y la ex sobrecargo ha mostrado que puede negociar mejor que sus compañeros varones que tanta misoginia le muestran.

La compra de una avioneta el no reportarla dentro de sus bienes patrimoniales la llevó a situarse hace cinco años en el ojo del huracán político, cuyo vendaval pronto pasó de ser tema de conversación.

Su participación en una sesión de fotografías sexys para una revista para caballeros, con poca ropa y lencería le generó críticas fuertes, pero ella, sabedora de que cuenta con buena figura, no hizo caso a envidias.

Durante su breve paso por la secretaría de Desarrollo en Michoacán, la hoy diputada local en el Distrito Federal fue tachada como incapacitada para el cargo, aunque no fueron esas las razones para ser relevada.

En su desempeño como secretaria de Turismo en el Distrito Federal y diputada federal, Barrales muestra gran enjundia y deseos de hacer bien las cosas, por lo que crece el reconocimiento a su capacidad.

Para asumir los retos que ha tenido en su carrera política, Alejandra Barrales se ha venido preparando, ya que de sobrecargo, sin carrera universitaria, pasó a estudiar derecho y hasta una maestría en administración, viendo hacia el futuro promisorio que busca.

En su ruta hacia el 2012, Barrales tendrá que enfrentar a otros militantes de su partido que buscan lo mismo que ella, destacando el secretario local de Educación,  Mario Delgado; el procurador Miguel Ángel Mancera; Jesús Ortega, dirigente nacional del partido; Dolores Padierna, ex jefa delegacional en Cuauhtémoc, ex diputada federal y local, entre otros cargos;  el senador Pablo Gómez y otros más que se apuntan ya para disputar con los colores perredistas la no tan lejana candidatura al gobierno del Distrito Federal.

*El debate sobre la posibilidad de legalizar las drogas en México polarizó las ya de por si amplias diferencias dentro del partido Acción Nacional.

Usando como pretexto la ineficacia del actual gobierno en la lucha contra el crimen organizado y la total apatía del gobierno sexenal anterior, los panistas se dan con todo.

El ex presidente Vicente Fox Quesada y el presidente Felipe Calderón Hinojosa, saltaron al ruedo y se lanzaron arteros descontones, donde el primero califica de ineficiente al segundo y éste a su vez, dice que durante la pasada administración no se realizó batida alguna en contra de los cárteles de la droga.

Uno de los primeros involucrados es el flamante e inamovible secretario de Seguridad Pública del gobierno de Felipe Calderón, Genaro García Luna, quien lanzó una feroz tarascada a las declaraciones de Vicente Fox, mordiéndose la punta de la lengua, al olvidar que él fue uno de los principales operadores de una estrategia que nunca se aplicó en el sexenio anterior y que parte de esas omisiones le corresponden a su gestión en la AFI.

*Será en los próximos días, cuando la alta jerarquía panista analice la situación de algunos militantes importantes que pretenden sean quemados otros militantes en leña verde.

Los casos de Manuel Espino y Luis Armando Reynoso Femat son los más llamativos, ya que uno actuó como dirigente nacional del partido y el otro, es todavía, gobernador de Aguascalientes.

ramonzurita44@hotmail.com