Cuando el futuro nos alcance
Mauricio Conde Olivares miércoles 22, Abr 2015“Hora 14”
Mauricio Conde Olivares
Las curva poblacional de México paulatinamente nos lleva a ser un país donde pasemos de una población mayoritariamente joven a una en la que el grueso de la rentabilidad nacional se vaya al rubro de las pensiones; por eso, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) puso el dedo en la llaga, al señalar que la creciente clase media puede ser vulnerable a la pobreza en la tercera edad.
En Quintana Roo, de 1 millón 594 mil habitantes, el 2.2% se encuentra en alguna situación de discapacidad, lo que es un problema adicional al pago de pensiones, tanto del sector privado, que aquí es muy boyante por la exitosa industria hotelera y también es una pesada carga del sector público.
El 2.2% del que hablo, se trata de personas que por enfermedad, por nacimiento, por adultez, que no puede trabajar y está integrado por alrededor de 40 mil personas; problema social que es atacado por la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, mediante un programa denominado “Empresas Incluyentes”.
A la fecha, en Quintana Roo sólo se han registrado cinco empresas para crear espacios laborales a personas con discapacidad, de ellas, la autoridad federal ha reconocido los esfuerzos del JW Marriott y hotel Casa Magna Cancún.
Existe también el distintivo “Empresa Familiarmente Responsable” y hasta ahora son seis municipios de los diez en el estado los que tienen ya red de vinculación laboral: Solidaridad, Isla Mujeres, Bacalar, OPB y Cozumel, pero falta Benito Juárez, cuya cabecera es Cancún, donde habitan ocho de cada diez residentes de Quintana Roo.
En esta entidad, privilegiada por la demanda de divisas provenientes del turismo, una persona normal tarda de tres a seis meses en volver a obtener un empleo, mientras que una discapacitada puede tardar más de 3 años en poder obtener una posibilidad de trabajo y ni siquiera bien remunerada.
Ello, pese a que hay incentivos fiscales para quien ocupe a una persona discapacitada, pues le exentan hasta el 100% del ISR y al que ocupa a un adulto mayor el 25%; también se absorben deducibles de impuestos cuando se hacen instalaciones para estas personas discapacitadas.
Pero de manera deplorable, en Quintana Roo solamente existen dos empresas con este distintivo.
Otro obstáculo para los trabajadores es la procuración de la justicia laboral, a través de las Juntas de Conciliación y Arbitraje, donde a la fecha en la entidad suman 6 mil 800 juicios, de los cuales el 90 por ciento son de las empresas de la hotelería, cuyos empresarios -justamente-, se han quejado de los procedimientos de esta autoridad al momento de hacer una inspección o una clausura.
En los hechos, resulta que los empresarios o sus representantes a veces no saben cuáles son sus derechos como patrones ni sus obligaciones, por ejemplo, al despedir a un empleado, por lo que llegan incluso a crear falsos escenarios de robo o de alteración del orden al interior de los centros de trabajo, entre otras triquiñuelas y amenazas.
Por ello, en mayo próximo la Secretaría del Trabajo y Previsión Social celebrará el llamado Foro por la Transparencia, tendiente a crear un manual de procedimientos y operaciones en las Juntas de Conciliación y Arbitraje.
La idea, es que la comunidad empresarial haga sentir sus experiencias para a partir de ahí elaborar manuales de operación y ser más abiertos en cuanto a los juicios de conciliación y arbitraje, para que luego no se quejen de los fallos adversos.
La autoridad federal, para asegurarse que este mensaje, llegue a toda la comunidad, invitaron a los empresarios, a través de la Coparmex y del Consejo Coordinador Empresarial.
El primer foro tendrá una duración de 15 días en la primera etapa, para luego hacer un compendio final y posteriormente discutir el manual de operaciones y hacer los cambios pertinentes.
Para atender esta encomienda de tiempo completo, Antonio Lomelín Diaque salió de la presidencia de la Junta Especial de Conciliación y Arbitraje Número 1 e ingresó Elide Meriggi Pérez.
Otro fenómeno económico laboral en Quintana Roo es la proliferación de las empresas “outsourcing” irregulares, a las que recurren en un 25% de las ocasiones las compañías que quieren abatir costos de operación y de recursos humanos, pero donde todas, todas, tienen como principal objetivo evitar los pagos de pensiones, por lo que la cacería para eliminar de la nómina anticipadamente y con el menor costo posible a los empleados con mayor antigüedad, es el deporte preferido de los directores de personal quintanarroenses.
Así, la más reciente declaración del delegado de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social en la entidad, Enoel Pérez Cortés, es lapidaria: “Pocas empresas en Quintana Roo se han mostrado hasta ahora interesadas en mejorar las condiciones de trabajo de sus colaboradores, más allá de las obligadas por ley”.
Aquí existen 5 mil 200 empresas registradas ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y muchos líderes de estas compañías temen ser inspeccionados.
De ahí, la trascendencia del informe Panorama de las Pensiones: América Latina y el Caribe, elaborado por el BID, y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) y el Banco Mundial. Porque el estudio ofrece indicadores comparativos de los modelos de pensiones de los 26 países de la región, incluido México.
El envejecimiento de la población amenaza con incrementar el gasto de las pensiones en México, América Latina y el Caribe. Al mismo tiempo, el elevado número de trabajadores en el sector informal que no hacen aportes para su pensión complicará la financiación de esos costos.
En la actualidad, sólo 45 de cada 100 trabajadores aportan a un plan de retiro, y este porcentaje apenas ha cambiado en las últimas décadas. Además de ser pocos, las contribuciones de estos trabajadores suelen ser demasiado irregulares para financiar unas prestaciones adecuadas.
Para 2050, entre 63 y 83 millones de personas podrían no recibir una pensión adecuada en ausencia de reformas y de esfuerzos por aumentar el empleo en el sector formal, incluyendo el acceso a educación de calidad; pero esto será motivo de análisis en otra entrega en punto de la Hora 14.