Muere otro joven afroamericano a manos de policía en Missouri
Mundo miércoles 20, Ago 2014- Ocho de cada 10 afroamericanos consideran que asesinato son un ejemplo de tensiones raciales
Un afroamericano de 23 años murió por los disparos de un policía en San Luis, Missouri, a pocos kilómetros de la localidad de Ferguson, donde ocurren las protestas por la muerte a tiros, por un agente, de un joven de la misma raza desarmado.
La policía indicó que el hombre, cuya identidad no fue divulgada, intentó robar en una tienda de comestibles con un cuchillo. Se dijo que, tras darle el alto para que soltara el cuchillo fuera de la tienda, el sujeto intentó atacar a un agente, que le disparó.
El afroamericano fue declarado muerto en el lugar de los hechos, a unos seis kilómetros de Ferguson. Sam Dotson, jefe del departamento de Policía de San Luis, indicó que el incidente está siendo investigado. Según él, el sospechoso había estado comportándose erráticamente antes del incidente.
En esta situación, según un nuevo sondeo, ocho de cada 10 afroamericanos consideran que el asesinato del otro afroamericano de nombre Michael Brown es un ejemplo de tensiones raciales, pero casi cinco de cada 10 blancos creen que la raza ha recibido una atención desmedida.
Una encuesta del Centro Pew realizadas tras el asesinato del joven afro americano de 18 años por disparos de un policía blanco, mostró que la población negra y blanca de Estados Unidos reaccionaron al tiroteo con opiniones encontradas.
Amplias diferencias raciales fueron también evidentes en las opiniones sobre si la policía local fue demasiado lejos en las secuelas de la muerte de Brown y sobre la confianza en las investigaciones del tiroteo”, señaló.
Un 80 por ciento de los afroamericanos consideró que el incidente presenta asuntos importantes sobre raza en Estados Unidos y sólo 18 por ciento cree que el tema racial ha recibido más atención de lo que se merece en la arena pública. En contraste, sólo 37 por ciento de los blancos estima que la muerte del joven debe servir como una oportunidad de hablar sobre temas raciales y un 47 cree que el ataque mereció una atención pública desmedida desde el 9 de agosto.