“Chino Antrax”, detenido sin fianza en EU
Seguridad viernes 11, Jul 2014El presunto narcotraficante mexicano José Rodrigo Arechiga Gamboa, alias el “Chino Antrax”, fue instruido hoy de cargos en una Corte Federal de San Diego y permanecerá detenido sin derecho a fianza, tras ser extraditado desde Holanda.
En una audiencia realizada este viernes, un día después de su extradición, Arechiga Gamboa fue notificado por el juez federal Mitchell D. Dembin de que enfrenta dos cargos de conspiración para importar sustancias controladas.
El acusado renunció a su derecho a una audiencia de detención, por lo que permanecerá detenido sin derecho a fianza en tanto se desarrollan los procedimientos para enjuiciarlo, confirmaron fuentes judiciales.
Una audiencia de mociones se fijó para el próximo 22 de agosto ante la juez federal Dana Sabraw.
Arechiga Gamboa fue detenido el pasado 30 de diciembre en el aeropuerto de Schiphol en Amsterdam, a petición de las autoridades estadunidenses.
Su detención se dio 10 días después de que un gran jurado federal en San Diego emitiera una acusación en su contra por cargos de distribución de cocaína y metanfetaminas.
Al ser aprendido en el aeropuerto en Holanda, Arechiga viajaba con el seudónimo de Norberto Sicairos García, y fue puesto bajo custodia tras bajar de un vuelo de la aerolínea KLM procedente de la Ciudad de México.
De acuerdo con los documentos presentados por las autoridades estadunidenses en apoyo de la extradición, Arechiga trabajó para el cártel de Sinaloa como guardaespaldas y como jefe de un grupo de sicarios conocidos como “Los Antrax”.
Arechiga presuntamente colaboró con el cártel de Sinaloa proporcionando seguridad para los envíos de drogas y la realización de las operaciones de ataque y ejecución de miembros de bandas y cárteles contrarios, en los que destacó para convertirse en uno de sus líderes.
De acuerdo con las autoridades estadunidenses, el “Chino Antrax” viajó a Holanda con un pasaporte mexicano falso obtenido al asumir la identidad de una persona muerta.
Arechiga extremaba sus cuidados para no ser detectado y llegó incluso a someterse a una cirugía plástica significativa, además de intentar alterar sus huellas digitales.
Aun así, agentes federales de Estados Unidos fueron capaces de confirmar su identidad a través de técnicas forenses.