Portugal-España, el duelo ibérico
Deportes martes 29, Jun 2010La Roja quiere dar un paso al frente en la Copa del Mundo Sudáfrica 2010, pero el equipo de Cristiano Ronaldo puede ponerle una zancadilla a sus aspiraciones
Ciudad del Cabo, Sudáfrica.- Cristiano Ronaldo y su selección portuguesa, que no ha recibido un solo gol en la fase de grupos del Mundial 2010, se cruza en los octavos de final en el camino de España a la gloria, en un duelo ibérico, donde la Roja liberada de la presión al fracaso, quiere dar un paso al frente.
Ciudad del Cabo acoge uno de los grandes duelos del mundial en el Green Point Stadium, pegado al océano Atlántico y con altas montañas de fondo repletas de historia. En un estadio que representa el renacimiento africano, España quiere lanzar un mensaje al mundo en la gran cita del futbol. La campeona de Europa está en Sudáfrica para luchar por el título. Se juega la vida, quiere romper con la historia, superar la barrera de octavos para comenzar a soñar.
España aprendió a competir en la exitosa Eurocopa 2008. Llega la hora de demostrarlo en un mundial, donde no supera los octavos de final desde Japón y Corea 2002. Ahora, liberada de la presión que supuso el estreno con derrota ante Suiza, confía en exponer su estilo de juego para crecer en el campeonato.
Se vio la selección española en un escenario inesperado. El mal inicio en el Mundial 2010 le obligó a ganar dos partidos que se convirtieron en finales contra Honduras y Chile. Superada la prueba y primera del Grupo H, los internacionales esperan un duelo intenso con Portugal, pero en el que la Roja podrá exhibir su juego, sin tener un planteamiento defensivo enfrente de una selección menor.
España llega a la cita con plena confianza en su juego, desmintiendo cambios de estilo y con un equipo base al que, por circunstancias, le ha faltado rotación.
Podrá contar Vicente del Bosque con su equipo tipo. Todo hace indicar que a última hora se recuperará Xabi Alonso del esguince de tobillo que sufrió ante Chile y será titular. La única baja confirmada es la de Raúl Albiol, que aún no ha debutado en el mundial. El seleccionador confía además en el crecimiento de Andrés Iniesta y Fernando Torres, que van ganando tono físico con el transcurso de la competición.
Nunca se habían enfrentado en un mundial España y Portugal, países que comparten candidatura a organizar la cita en 2018 o 2022. En las en 35 ocasiones en que han cruzado su camino, el balance favorece a los españoles con 16 triunfos por doce empates y siete derrotas. La última vez fue especialmente dolorosa para la Roja, apeada de la Eurocopa 2004 por los lusos.
En esta ocasión, Portugal llega a la cita con varios jugadores frescos tras recibir descanso ante Brasil. Queiroz buscó que la mayoría de su plantel disputase algún minuto durante el mundial y ahora ante España apostará por lo mejor que tiene disponible.
Hasta última hora no sabrá si tres de sus bazas pueden estar en el encuentro de octavos, Danny, Duda y Amorim. Molestias musculares y un hematoma les restan opciones de jugar. Ninguno se perfilaba como titular pero son piezas importantes para los cambios.
El combinado luso está echando en falta la fuerza y seguridad en la banda derecha del jugador del Chelsea Bosingwa y la calidad y capacidad de desborde del extremo del Manchester United Nani. Salvo la segunda parte ante una desmoronada Corea del Norte, Portugal tiene problemas de creación de jugadas peligro y Cristiano Ronaldo está muy solo para poner en aprietos a los rivales.
En cambio brilla su faceta defensiva y, ante España, Portugal podría batir su marcha histórica de 19 partidos sin perder (13 triunfos y seis empates), aunque Simao descarta que planteen una estrategia defensiva: saldrán “atacar y jugar con alegría”.
Ese récord es un muestra de que el guardameta Eduardo y la defensa están cumpliendo, lo que ha llevado a que Portugal fuese el único equipo que no encajó ningún gol en la fase de grupos del mundial. Queiroz volverá a apostar por su sistema 4-3-3, en el que el jugador del Real Madrid Pepe y Meireles volverán a dar empaque defensivo al centro del campo luso, que tendrá mucho trabajo para frenar a los cerebros del fútbol español.
Para la creación estarán Tiago, en el lugar de Deco, que no debe entrar en el once, tras no entrenarse con sus compañeros durante una semana, y Simao, que con las posibles bajas de Danny y Duda, se convierte en el único acompañante de Cristiano en los extremos.