Grabaciones y lenguaje
Ramón Zurita Sahagún martes 22, Jun 2010De frente y de perfil
Ramón Zurita Sahagún
Primero fue Fidel Herrera, luego Mario Marín y ahora Ulises Ruiz, los que han sido evidenciados mediante grabaciones ilegales que llegan misteriosamente a manos de sus adversarios o de los medios de comunicación.
En cada una de esas conversaciones telefónicas que les han sido interceptadas se les muestra como sujetos políticamente incorrectos, capaces de todo en aras de la conservación del poder y dueños de un lenguaje impropio y hasta deleznables.
Dos de ellos, Herrera y Ruiz, son evidenciados como orquestadores de las campañas de sus respectivos delfines, Javier Duarte y Eviel Pérez, los que son mostrados como simples marionetas, ausentes de decisiones propias.
El tercero de los gobernadores, Mario Marín, es llevado hacia una figura jurídica cuyos antecedentes le han dado fama, la pederastia.
No se trata de llevar a ninguno de ellos a instancias judiciales, ni se busca que se les sancione en forma alguna, aunque si se trata de que esas grabaciones ilegales causen daño en las aventajadas campañas electorales cuya tendencia, aparentemente, beneficiará a los candidatos del tricolor.
Los tres gobernadores son sumamente cuestionados por la oposición por sus métodos, provenientes del priísmo arcaico, pero que en sus respectivas entidades ha dado resultados estupendos.
Las elecciones intermedias en cada uno de los estados mostraron que las formas de gobierno de Herrera, Marín y Ruiz, son respaldadas por la ciudadanía que votó en forma masiva por los candidatos propuestos por el Revolucionario Institucional.
Fue un triunfo contundente en cada una de esas entidades (Veracruz, Puebla y Oaxaca) que sorprendió hasta a los propios dirigentes del partido, triunfo que fue ratificado dos años más tarde durante el proceso electoral federal.
Es cierto que en Veracruz en ambas contiendas se perdieron un par de distritos, pero a cambio se recuperaron alcaldías que la oposición mantenía en su poder como el puerto de Veracruz, Córdoba y Coatzacoalcos.
Pero en Puebla y Oaxaca los triunfos fueron arrolladores en cada uno de los distritos electorales, tanto a nivel electoral como federal, dejando sin un espacio de mayoría tanto en el Congreso local como en el federal a los demás partidos.
Lo sorpresivo de estas victorias en el ámbito local dejó sin oportunidad de convertirse en diputado y coordinador del Congreso local al hoy candidato del PRI al gobierno estatal, Javier López Zavala, quien tuvo que ser reubicado dentro de la administración pública estatal para prepara desde ahí su proyección a la candidatura tricolor.
En Oaxaca también pusieron zapato a los opositores del PRI en lo local y en lo federal, sin que ningún otro partido pudiese alcanzar una curul de mayoría, sin importar el partido que representaran.
Fue por eso que los partidos adversarios del PRI decidieron unirse en coalición, sin importar las diferencias ideológicas, para tratar de frenar a esa bien aceitada maquinaria priísta, lo que consiguieron en Puebla y Oaxaca, postulando a dos políticos, senadores ambos, que militaron antes en el partido tricolor, como antídoto para revertir la creciente tendencia a favor del PRI.
En Veracruz no pudieron hacer lo mismo por contar los partidos de izquierda con un candidato, aparentemente, fuerte que, incluso, había ganado cuatro años el escaño senatorial de mayoría como en los casos de los candidatos Rafael Moreno Valle de Puebla y Gabino Cué Monteagudo de Oaxaca.
El prietito en el arroz lo representó el obcecamiento del dirigente nacional del PAN, César Nava Vázquez y del ahora candidato Miguel Ángel Yunes Linares, por convertirse en el abanderado de la gran alianza, lo que fue rechazado por la izquierda.
Con todo y ello, con la excepción del candidato aliancista en Oaxaca, los otros dos candidatos (Veracruz y Puebla) no crecieron al mismo ritmo y se quedaron rezagados ante el crecimiento de los candidatos priistas.
Por eso, se buscaron nuevos métodos y tácticas para convencer al electorado de los excesos y abusos que cometen estos gobernantes en uso del poder y desenmascararlos ante el electorado y este decida darles la espalda.
Al parecer, el sistema les está funcionando, ya que con inusitada frecuencia aparecen grabaciones de los espías que se encuentran colgados de las líneas telefónicas en una regresión del sistema político mexicano.
Nadie se hace responsable de las grabaciones, pero el dirigente nacional del PAN, César Nava decide dar el grito de arranque en este incesante maratón que amenaza con prolongarse hasta el mismo día del proceso electoral.
Y en este lindo país de la impunidad, todos quieren lavarse las manos, los que son espiados por considerar que se trata de una forma ilícita de escuchar conversaciones privadas y por lo mismo no constituyen pruebas en su contra y los que practican el espionaje se curan en salud argumentando que a ellos les llegan por vías anónimas las mismas grabaciones.
*La Asociación Nacional de la Publicidad AC otorgó un reconocimiento por su destacada labor altruista y a su gestión como directora estatal del DIF en Tamaulipas a la señora Adriana González de Hernández.
Dicha entrega se realizó durante una comida celebrada en el Club de Industriales a la que asistió acompañada de su esposo el gobernador de Tamaulipas, Eugenio Hernández Flores.
*Finalmente, el gobernador Enrique Peña Nieto decidió proponer a Alfredo Castillo como procurador estatal de Justicia del Estado de México, en lo que sería, en caso de ser aprobado, una prórroga del interinato que asumió desde la renuncia de Bazbaz.
En esa entidad se manejaron una serie de personajes con más renombre para ocupar la vacante, como son el ex gobernador César Camacho; el ex procurador general de la República, Humberto Benítez y el actual director de la ASE, David Garay, aunque la designación recayó en el interino Castillo, al que tendría que aprobar el Congreso estatal.