Emotivas Bodas de Oro de Alicia y Antonio
* Especiales, Espectáculos miércoles 26, Mar 2014- Después de 50 años de casados, la ejemplar pareja renovó sus votos matrimoniales ante la presencia de Dios en emotiva ceremonia religiosa realizada en Santa Iglesia Catedral de Tehuacán, Puebla
Gloria Carpio
Mario, Diana Verónica, Claudia Adriana, Antonio y Miguel Ángel agradecen a Dios el permitirles tener unidos a sus padres, quienes han sido su ejemplo de amor.
Un 4 de marzo de hace 50 años, Dios bendijo a una joven y bella pareja y delante del Señor se comprometieron a amarse y respetarse en lo próspero y en lo adverso, en la salud y en la enfermedad, así hasta que sólo la muerte los separe.
Hoy, 50 años después renovaron sus votos ante Dios, ahora en compañía de sus hijos, nietos y bisnieta.
La bella historia de Alicia Espinosa Soto y Antonio Cortés Meza es digna de contarse y celebrarse. Se conocieron en enero de 1961 y tres meses después aceptaron ser novios. Tres años después, el 4 de marzo de 1964 se casaron y desde entonces juntos han vivido momentos muy felices a lado de sus cinco hijos: Mario, Antonio, Miguel Ángel, Claudia y Verónica Cortés Espinosa.
Y es así como después de 50 años de casados, la feliz pareja renovó sus votos matrimoniales ante la presencia de Dios en emotiva ceremonia religiosa realizada en Santa Iglesia Catedral de Tehuacán, Puebla.
El sacerdote que ofició la homilía recibió en las puertas del santo recinto a los festejados, quienes entraron junto a sus hijos; por cierto que Mario viajó desde Japón para estar al lado de sus papás en este feliz, inolvidable e histórico acontecimiento.
En la conmovedora ceremonia religiosa, Alicia y Antonio realizaron el rito, tal y como hace 50 años, se entregaron los anillos, las arras y se les colocó el lazo nupcial, para después recibir la bendición de cada uno de sus hijos, así como del sacerdote.
Después de la ceremonia por sus Bodas de Oro, la familia Cortés Espinosa salió del recinto entre aplausos y felicitaciones de parte de todos sus seres queridos.
Más tarde, los festejados llegaron al salón de fiestas donde disfrutaron de una noche inolvidable llena de buenos recuerdos, felicitaciones y abrazos de parte de todos sus seres queridos e invitados.
En el lugar, Alicia y Antonio bailaron un vals junto a todos sus hijos, nueras, yernos, nietos, bisnieta, hermanos, hermanas, sobrinos y demás seres queridos; después, los enamorados se dieron un tierno beso ante la algarabía de todos los presentes.
Posteriormente, la bella Marty Saula Armas Luna, esposa de Mario Cortés Espinosa y nuera de Alicia y Antonio, dirigió unas emotivas palabras previas al brindis. “Festejemos porque somos parte de la inolvidable historia de Alicia y Antonio, y porque somos el sueño que soñaron, porque nos enseñaron con su ejemplo del amor que no tiene envidia, que no se irrita, que no busca lo suyo, que todo lo sufre, que todo lo perdona, que todo lo vive con intensidad, porque nos enseñaron con su ejemplo a ser valientes en medio de la tempestad y a entender que el fracaso es relativo.
Brindemos porque estamos felices de tenerlos, porque aprendieron a hacer de las penas el momento de estar juntos, celebremos que hay vida en sus ojos, para ver a los nietos y bisnieta que corren a sus brazos, para ver a los hijos que vuelven siempre a casa, para mirar atrás y saber que las cosas las han hecho más que bien.
Festejemos, porque 50 años de amor no se festejan todos los días, brindemos porque no todas las noches son noche de boda”, palabras que salieron del corazón de Marty Saula Armas Luna para sus suegros, palabras que aplaudieron todos los familiares y amistades, quienes aprovecharon cada momento para desearles lo mejor a los novios.
Música, baile, felicitaciones, regalos, bendiciones y parabienes recibieron Alicia y Antonio en su celebración de 50 años de vida matrimonial, donde volvieron a vivir momentos inolvidables, sólo que esta vez al lado de sus hijos, nietos, bisnieta y seres queridos.
