La educación es el igualador social por excelencia: José Narro Robles

El rector de la UNAM consideró que hace falta una verdadera política pública en investigación para avanzar en este campo y afirma que México requiere un modelo económico propio, que responda a su realidad y que tome en cuenta los recursos, avances y condiciones que tiene

El gobernador Enrique Peña Nieto y al rector de la UNAM, José Narro Robles, en el marco de los Foros de Reflexión Compromiso por México, eje Educación y Cultura. (Foto: Gustavo Camacho)

Toluca, Estado de México.- Al concluir los trabajos de los foros de reflexión Compromiso por México, en su eje Educación y Cultura, José Narro Robles, rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) manifestó que la gran palanca para salir adelante tiene que ver con la educación superior y con la estructuración de un verdadero sistema de ciencia, desarrollo tecnológico e innovación.

“No hay duda, para tener mayor productividad y ser más competitivos se necesita educación”, agregó el rector, tras afirmar que la educación es fuente de superación y sigue siendo el igualador social por excelencia y, por tanto, insustituible.

Con la presencia del gobernador Enrique Peña Nieto, sentenció que México necesita un modelo económico propio, que responda a su realidad y que tome en cuenta los recursos, avances y condiciones que tiene. El principal desafío de la educación superior, dijo, es aumentar la cobertura y hacerlo con equidad  y calidad, porque los años que restan del bono demográfico se están desaprovechando.

“Es cierto que ni la sociedad de la información, ni la economía del conocimiento tienen todas las respuestas, pero también es verdad que sin ellas no hay desarrollo real”, agregó ante especialistas en Investigación Educativa, directivos, docentes, y los presidentes de la Junta de Coordinación Política de la legislatura local, diputado Ernesto Némer Álvarez, y del Tribunal Superior de Justicia, magistrado Baruch Delgado Carbajal.

Narro Robles consideró que los cambios acelerados del mundo, obligan a diseñar un proyecto de país diferente, “el nuevo, tenemos que acordarlo con la participación de todos, la sociedad civil, las fuerzas políticas, empresarios y los poderes Ejecutivo y Legislativo federal y los correspondientes a las entidades”. Consideró éste el momento para suscribir un nuevo acuerdo nacional, que no se logrará aferrándonos a viejas ideas, sino a la definición de las prioridades nacionales para rectificar, “porque es evidente que ya no estamos avanzando como se debe y a la dimensión que se requiere”.

Dijo que la escasa participación del sector privado y, sobre todo el reducido presupuesto público, y “la falta de una verdadera política pública en la materia son reconocidos por la comunidad científica del país como algunos de los principales problemas para avanzar en este campo”.

Entre estos acuerdos, continuó el rector de la UNAM, se requiere construir de manera prioritaria una clara y ambiciosa política de Estado en materia de educación superior, ciencia, tecnología y cultura que trascienda al corto plazo, y advirtió que mientras más tardemos en tomar las acciones necesarias, seguirán acentuándose nuestros problemas y seguiremos rezagándonos en el concierto internacional.

El miembro de la Academia Nacional de Medicina y Doctor Honoris Causa por la Universidad Nacional del Perú, señaló necesario convertir a la educación, sobre todo la de nivel superior, a la ciencia en todas sus áreas, y a la tecnología, en ejes centrales, en estrategia para el desarrollo de la nación. “Estoy convencido que si no se otorga la prioridad debida a la generación y difusión del conocimiento, si no se define para ello una política de Estado, México no tendrá el papel que merece en un concierto internacional, donde el conocimiento desempeña el papel principal en la vida social y también la productiva”.

En su disertación, cuestionó los pocos avances en el número total de graduados en doctorados, en la creación de investigadores y en la poca producción de investigaciones, amén de los limitados recursos per cápita en ciencia y tecnología, la reducida certificación de patentes y un gasto federal inferior al 0.4 por ciento del PIB, así como una competitividad económica ubicada en el lugar 60 de entre 133 países. Hizo un llamado a la iniciativa privada para invertir en ciencia y tecnología, como opción para que en el futuro, las empresas cuenten con técnicas propias que haga más competitivo al sector.

En el panel Ciencia y Tecnología: Situación Actual y Retos en el Siglo XXI, Jesús Kumate Rodríguez, presidente de la Fundación IMSS; René Asomoza Palacio, director general del Centro de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional; Eduardo Gasca Pliego, rector de la Universidad Autónoma del Estado de México; Grace D. Lieblein, directora general de General Motors de México; y Yoloxóchitl Bustamante Díez, directora general del Instituto Politécnico Nacional, coincidieron en la urgente necesidad de superar las dificultades del desarrollo científico y tecnológico en nuestro país.

Para ello, señalaron que es necesario que las instituciones se adecuen al contexto actual e inviertan en educación, ciencia, tecnología e innovación, pues estas acciones constituyen una cadena que impulsa la productividad y la competitividad nacional. De esta manera, indicaron, el crecimiento en el nivel académico en México, sumado al impulso a la investigación y a la cooperación entre organismos públicos y privados, permitirá generar una corriente de revolución tecnológica acorde con las necesidades de la sociedad, la economía y la educación actual.