Peligroso e inseguro el aeropuerto de Cancún
* Especiales, Nacional lunes 10, Mar 2014- Líneas áreas Magnicharters y VivaAerobus operan en un lugar inapropiado y riesgoso
José Luis Montañez
La Secretaría de Comunicaciones y Transportes, a cargo del mexiquense Gerardo Ruiz Esparza, debe meter en orden a los propietarios y operadores de Aeropuertos del Sureste (Asur), ya que la terminal aérea de Cancún está convertida en un lugar que viola las normas internacionales de seguridad y operatividad de la aeronáutica, poniendo en peligro la vida de miles de usuarios.
Los pasajeros de las líneas Magnicharters y VivaAerobus deben cruzar para llegar a su estacionamiento, mostradores y salas de abordar por una avenida donde se encuentran estacionados decenas de tractocamiones.
Esos vehículos están cargados con miles de litros de turbosina y no queremos ni imaginar si alguno de los viajeros o sus acompañantes arrojara desde algún vehículo que circula por ese sitio una colilla de cigarrillo encendida o algún otro objeto que produzca una chispa. En ocasiones, las pipas almacenan más de un millón de litros del combustible, mientras esperan horas en la vía de acceso para entregar la turbosina.
Todo se hace en un mismo espacio, a metros de donde despegan los enormes jets con pasajeros de todo el mundo.
Por si eso fuera poco, el edificio principal está convertido en un verdadero tianguis, obligando a los usuarios a amontonarse en pequeños espacios, pues los concesionarios de Aeropuertos del Sureste han hecho el negocio de su vida vendiendo a precio de oro cada centímetro de la terminal aérea.
Para ellos, el usuario y las normas internacionales de aeropuertos es lo de menos.
Esto hizo que las empresas Magnicharters y VivaAerobus fueran sacadas del edificio central y enviadas a una bodega abandonada, donde se improvisaron salas de pasajeros, mostradores y hasta módulos de servicio. Y todo porque estas compañías dan servicio en su mayoría a pasajeros nacionales y sus tarifas han hecho que las prefiera un mayor número de viajeros.
Ya sabe usted que hasta en esto, Aeroméxico, Interjet y Volaris tienen controlado el mercado y no aceptan que otros oferten boletos de viaje a menor costo de los estratosféricos precios que fijan por un pasaje.
Estamos a tiempo de evitar una catástrofe en el Aeropuerto Internacional de Cancún y de que el titular de la SCT, Gerardo Ruiz Esparza, llame a cuentas a los concesionarios y operadores del Asur, pues la seguridad e interés de los miles de pasajeros está primero que el negocio voraz de unos cuantos.