«No tenía para darles de comer, por eso maté a mis dos hijos», confiesa el tepiteño
Seguridad jueves 10, Jun 2010El desalmado padre ubicó los lugares donde dejó los cadáveres de los menores
Javier Covarrubias González, quien hace unos días desató protestas vecinales tras inventar el robo de sus hijos, declaró a las autoridades que mató a sus dos pequeños porque tenía problemas económicos y no podía mantenerlos, indicó ayer el titular de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF), Miguel Ángel Mancera.
Mencionó que el presunto filicida ubicó los lugares en un cerro donde supuestamente había colocado los cuerpos de sus hijos, aunque aún falta que concluyan estudios de ADN para corroborar su identidad.
“Los motivos que él aduce parecen absolutamente insuficientes. Él dice que priva de la vida a sus hijos, porque se encuentra en una situación absolutamente desesperada, que no tiene los ingresos suficientes, que ya no puede mantenerlos, que no tiene para comprar alimentos”, relató.
Covarrubias, de 20 años, inventó en los últimos días al menos dos historias sobre la desaparición del niño Darien Isai, de dos años y medio, y de la niña Isis Liliana, de un año y medio.
Denunció a finales de mayo el robo de los pequeños en el barrio popular de Tepito en la capital. Los vecinos realizaron por casi un día varios bloqueos y algunos actos de vandalismo para protestar por el robo de los menores. Covarrubias desapareció y comenzó a ser buscado por las autoridades para que ampliara su denuncia.
Las autoridades anunciaron su detención el domingo y que había declarado que entregó a sus hijos a una mujer en un intento por saldar una deuda de 25 mil pesos (unos mil 925 dólares). Esto, sin embargo, también resultó falso.
El asunto tomó otro giro cuando el martes se encontró en un cerro el cuerpo de un menor en una bolsa de plástico. La ropa era similar a la que llevaba el hijo cuando desapareció.
El hombre volvió a ser interrogado y nuevamente cambió la versión. Aseguró que mató a los niños y ocultó los cuerpos en el cerro. La policía encontró también el cuerpo de la que podría ser la hija.
Según Mancera, el hombre dijo que inventó las historias porque no quería perder a su esposa, a quien afirmó querer mucho.
Este es el segundo caso de una historia que involucra este año a menores muertos y que inicialmente fueron reportados como desaparecidos.
En marzo los padres de Paulette Gebara, de 4 años, reportaron la desaparición de la niña. Nueve días después el cadáver apareció dentro de su propia habitación. Los indicios apuntaron inicialmente como culpable a la madre, pero la investigación oficial concluyó que se trató de un accidente.
Las conclusiones oficiales no convencieron a la opinión pública y llevó al procurador del Estado de México a renunciar.