El shock energético
¬ Juan Manuel Magaña lunes 2, Dic 2013Política Spot
Juan Manuel Magaña
Mucho sigue teniendo de bifrontismo la escena mexicana, cuando una parte del país mira para un lado, la otra parte voltea hacia el otro.
El presidente Enrique Peña Nieto aseguró ayer que en este primer año su gobierno ha hecho de la aprobación de las reformas estructurales su máxima prioridad y confió en que los cambios pendientes en materia energética y política salgan adelante.
Mientras, el líder de la oposición real, Andrés Manuel López Obrador, exhortó a sus seguidores a estar atentos a su llamado en los próximos días para iniciar el cerco al Senado de la República en oposición al cambio energético.
Pidió que en cuanto se comience a dictaminar la reforma a los artículos 27 y 28 de la Constitución “hagamos el compromiso de estar todos, obviamente me incluyo, ahí voy a estar, todo el tiempo que sea necesario”.
La fecha de ayer forma parte de un ritual político gastado y alterado por el tiempo. Se cumplió el primer año del regreso del PRI al poder con el mexiquense Peña Nieto como presidente.
Pero no hubo estridencia de ningún tipo ni en Palacio Nacional ni en Los Pinos. Más bien rutina si se puede decir normal, para ser domingo, con la entrega de los premios nacionales de Deporte y de Mérito Deportivo 2013, por parte del mandatario.
Peña aseguró que las reformas en su conjunto son la base para que México logre un crecimiento económico más acelerado, sostenido y sustentable para los próximos años y décadas.
Hasta ahora se han aprobado las reformas educativa, de telecomunicaciones, financiera, de transparencia y fiscal, que ciertamente han movido a múltiples sectores de México. Mucho han motivado de resistencia y, al final, las reformas han tenido que dejar algo o mucho en el camino hacia su aprobación.
Casi ninguna ofrece resultados importantes a corto plazo, por lo que no le cambian en casi nada la vida al ciudadano actual, la prueba está en que siguen ahí la violencia y el estancamiento económico.
Otras distan mucho de ser lo que se esperaba, como la fiscal, sobre la que hay consenso en decir que sólo se trató de una miscelánea más para tan sólo tratar de salir adelante en 2014. En materia educativa y de telecomunicaciones, su futuro mucho dependerá de lo que la reacia realidad disponga a la hora de buscar su aplicación.
Todo esto que ha ocurrido va configurando el futuro electoral que el PRI tendrá en los comicios intermedios de 2015, si bien lo conseguido ha sido en función de la colaboración del PAN y el PRD a través del mecanismo de entendimiento llamado Pacto por México.
Sin embargo el PRI puede vender ya una imagen reformadora, pero a pesar de ello nadie cree que vender futuro resulte tan suficientemente atractivo a un electorado. Ese es el dilema.
Pero, ciertamente, falta lo importante. La reforma energética es la más largamente acariciada por las últimas generaciones de priístas. Y no se diga de panistas. Estas dos fuerzas políticas la tienen al alcance de su mano. Pero es al mismo tiempo la única que tiene un rechazo social mayoritario.
Y este es el filón político que con una gran naturalidad piensa explotar una fuerza naciente y creciente como es Morena, el movimiento encabezado por López Obrador en vías de convertirse en partido político.
Está por verse qué tan lejos piensa ir en realidad el PRI con la reforma energética.
El PAN quiere la privatización absoluta. ¿Irá el PRI de veras por la reforma al 27 y 28 constitucionales? ¿De qué quiere convencer al PAN concediéndole una reforma política?
¿Por qué el PRD de “Los Chuchos” se afana ahora en no dejarse rebasar por la irrupción de Morena en el escenario? En dos semanas todas las dudas serán despejadas.
Han comentado muchos con respecto a la Reforma Energética, los pros y los contras, la realidad de esto es que esta reforma trae más beneficios que cualquiera que se hayan puesto en marcha, aquí la situación es aceptar que realmente nos beneficia, no podemos dejar que nuestro crecimiento económico se vea truncado sólo por el capricho de unos cuantos. Es necesario tomar el paso hacia nuestro desarrollo.
Después de tantos años, ya era necesario una serie de reformas en el país, nos estábamos estancando, necesitamos de propuestas como las del presidente para cambiar desde adentro, de otra forma serian cambios superficiales y por lo tanto, temporales, ahora podemos estar seguros de que los cambios de efectuarán, el desarrollo del país está en buenas manos, La reforma energética nos coloca en un mercado competitivo muy importante, considero que dicha reforma es una de las claves para un mejor país.