IVA no va
¬ Juan Manuel Magaña lunes 9, Sep 2013Política Spot
Juan Manuel Magaña
Evidentemente el horno no estuvo para bollos y mejor nadie le movió al IVA.
La CNTE había llamado ya a un “paro cívico nacional” para este miércoles y uno ya no sabe qué más se les ocurrirá.
Por su parte Andrés Manuel López Obrador mostró músculo en la plaza y convocó a otra movilización para el 22. Así que septiembre luce muy complicado.
Los maestros disidentes han decidido permanecer en su plantón del Zócalo y extender sus protestas hasta las fiestas patrias y más allá del problema educativo. Ya se han enganchado con las luchas de rechazo a las reformas energéticas y hacendaria, y con otros movimientos sociales y políticos como el de AMLO.
A todas luces no había condiciones para hornear otra fuerte reforma como la hacendaria, porque si bien el alto grado de temperatura que están alcanzando las protestas constituyen un obstáculo, lo es también la difícil situación de la economía nacional, cuyas perspectivas han sido recortadas varias veces en este año.
El propio presidente Enrique Peña Nieto así la midió cuando explicó que el diseño de las medidas que conforman la reforma estuvo guiado por el ánimo de minimizar la afectación a los sectores más vulnerables de la población. “Es por ello que se evita la generalización del impuesto al valor agregado (IVA) a los alimentos y medicinas”.
Mejor se optó por hacer una reforma parcial, como está resultando con todas. Reformismo gradual, es lo mejor, reformismo es gradualismo, y con ello se quita un fuerte elemento de inconformidad para la calle.
La iniciativa de reforma fiscal que este domingo presentó el presidente Enrique Peña Nieto considera elevar la recaudación tributaria, sí, para ayudar a impulsar el crecimiento del país.
Pero se decidió no aplicar el Impuesto al Valor Agregado (IVA), cuya tasa actual es del 16 por ciento, a alimentos y medicinas, que seguirán gozando de tasa cero.
Según lo planteado, el gobierno prevé que la reforma incrementará los ingresos públicos correspondientes a 2014 a un total de 240 mil millones de pesos. Se ofrece algo que puede tener aceptación popular: elevar la tasa de impuestos a los que más tienen y gravar ya las ganancias en bolsa y dividendos.
Aquí aparece Robin Hood para hincarles el diente a los que más ganan en este país, pero vamos a ver cómo reaccionan éstos porque si hay algo que siempre les duele no son los pesos, sino los centavos.
Hay que conocer más el contenido de la reforma, pero por la mañana de ayer circuló un borrador (que resultó atinado en lo del IVA) que decía que también venía algo muy deseado: reducir la carga fiscal de Pemex a menos de un 60 por ciento desde el 79 por ciento actual..
Habrá que examinar muy bien la iniciativa de reforma fiscal, pero el que desaparezca el fantasma del IVA es quitarle un gran motivo a la inconformidad social.
Al margen de lo magisterial, las movilizaciones que ya comenzaron anunciaban el propósito dual de frenar las reformas energética y hacendaria, y concretamente rechazar el IVA en alimentos y medicinas.