Impacta el Noveno Encuentro de Circo Joven
* Especiales, Espectáculos miércoles 29, Ago 2012- El Atayde abre su carpa al circo contemporáneo y se retroalimenta de las nuevas generaciones
Gloria Carpio
Los elefantes de la India, dirigidos por Mauricio Saavedra. / Foto: Iván Ávila
El Circo Atayde Hermanos no ocuparía el lugar que posee en el mundo (es una potencia universal) si a través de sus 124 años de existencia no hubiera creado los cuadros que a lo largo de las generaciones han reemplazado a sus artistas. Y esa rica cantera del arte circense ha quedado instituida y consolidada con la celebración cada año de los “Encuentros del Circo Joven”, que en esta ocasión llegó a su novena versión y tuvo como anfitriona a la “Carpa Astros”, sede del Atayde.
Como institución de la empresa de entretenimiento más antigua de México pretende fomentar en forma permanente y no eventual el diálogo creativo, entre lo que es el circo clásico y el contemporáneo, que son dos escuelas y dos corrientes del arte que se han complementado y retroalimentado a lo largo de la historia.
Y la reunión como se esperaba tuvo un cúmulo de sorpresas, pues en México, fundamentalmente en nuestra provincia, existen familias y grupos que cultivan el circo como un género artístico y siguen existiendo las escuelas de payasos, de malabaristas y de domadores.
Federico Serrano, el vocero del circo, nos comentó que el “Circo Atayde Hermanos” instituyó este encuentro con los cirqueros jóvenes, porque está obligado a renovarse, pero desde una perspectiva de continuidad.
“Está obligado a modernizarse, pero son traicionarse; a reinventarse sin negar su fabulosa historia, para revolucionar las artes y abrirse a propuestas novedosas que garanticen la preservación de su memoria universal y su legado histórico”.
Por eso sus propios artistas ocuparon las sillas del público, para ver a los artistas de Colima, donde Marco Sánchez y Diego Álvarez presentaron un espectáculo a base de la percha de equilibrio.
Itzel Acosta de Puebla sorprendió caminando sobre un alambre tenso, con un bailable como si se tratara de una pista; Sandra Rodríguez, del Distrito Federal mostró cómo ha evolucionado el manejo del aro en las alturas; Elisa Infante, también de Puebla mostró las potencialidades que puede tener una simple honda.
De Costa Rica vino a México Irene Esquivel, Marco Muñoz, Max Rueda y Jason Rivera con malabares a base de fuego.
Todos ellos alternaron con los grandes artistas del momento, como son Alaín Alegría en el trapecio y Celeste Atayde, que les mostró la doma de los elefantes de la India.
El intercambio se dio por demás fructífero, pues tanto los jóvenes, como los más experimentados cirqueros, anhelaban el intercambio, la búsqueda de experiencias y conocer las pericias de los jóvenes ejecutantes que venían respaldados por sus compañías.
Uno de los muchos objetivos afloró de inmediato: el descubrimiento de nuevos talentos para la pista, sin importar si pertenecen a no a familias circenses, pues la premisa es recordar el sueño de un joven como Aurelio Atayde Guizar, que en agosto de 1888 hizo posible la fundación del “Circo Atayde Hermanos”, sueño que debe replicarse cuantas veces sea necesario.
Y es que la reunión realizada en la “Carpa Astros” no fue un simple intercambio de rutinas, ya que se cuidó que las nuevas propuestas tuvieran su propia identidad, cultura, raíces, memoria y porvenir.
Federico Serrano nos contó que un auténtico espectáculo de circo reposa sobre cuatro elementos como la doma de animales, en el otro pilar figura la acrobacia aérea y de piso; en el tercero los juegos malabares y los trapecios y en el cuarto la comicidad de los payasos, las contorsiones y el equilibrismo.
En el Noveno Encuentro de Circo Joven se presentaron ocho propuestas de lo que es el circo contemporáneo, pero fue importante observar que el circo clásico sigue vigente.
La producción de esta función de retroalimentación estuvo a cargo de Celeste Atayde, mientras que Mario Ibáñez estuvo a cargo de la coordinación técnica, que tiene que ver mucho con la tramoya y las asistencias; Juan Carlos González Andrade estuvo a cargo del sonido, que en los circos opera como cimiento, al igual que la iluminación, donde estuvo Rey Jesús López y César Rebolledo en la dirección de la pista, que es tan importante que en este arte un segundo de retraso puede ser mortal.
Y como dice el propio Federico Serrano: ¡VIVA SU MAJESTAD, EL CIRCO!
Actualmente el Circo Atayde presenta su temporada de verano, la cual concluirá el 16 de septiembre. El Atayde está en la Carpa Astros, de Calzada de Tlalpan 855 a un costado del Metro Villa de Cortés y sus funciones son de lunes a sábado a las 17:00 y 20 horas y los domingos hay una función más a las 12:00 horas en la Carpa Astros.
